gallo, que se mantienen dentro de la
propuesta que había efectuado la Co-
misión Europea.
El rape se incrementará un 5% en
aguas ibéricas, por lo que se podrán
pescar algo menos de 3.500 toneladas.
Esta especie, por el contrario, sufre un
descenso del 7% en aguas francesas
del golfo de Vizcaya, y del 2% en aguas
de Irlanda. Recortes que mantienen la
propuesta de la Comisión Europea. En
cuanto a las rayas, en aguas ibéricas,
su TAC se incrementará en un 10%, lle-
gándose a las 1.472 toneladas.
De espectacular cabe calificar la su-
bida del TAC para el jurel en aguas de
Galicia y Portugal, ya que alcanza un
69,2%. A nuestra flota le correspon-
derán 24.324 toneladas, diez mil to-
neladas más que en 2018. En el Can-
tábrico, la posibilidad de captura se
incrementará hasta las 16.895 tonela-
das (un 17,9% más que en 2018).
LA CIGALA, CUOTA “0”
En la parte de los recortes que más
afectan a la flota española, además de
la situación de la merluza del stock sur
y el rape en aguas de Gran Sol, don-
de desciende un 1,5% (quedándose
en 1.212 toneladas), habría que citar
la bajada de un 20% en la caballa de
aguas ibéricas, con lo que se quedarán
las posibilidades de captura por parte
de España en 24.597 toneladas, de las
30.746 que tuvo en 2018. La bacaladi-
lla cae en un 20,3%, en el norte, hasta
las 41.383 toneladas para nuestra flo-
ta, y un 17,6% en el sur, con un total
de capturas de 35.251 toneladas para
este año.
La cigala en el Cantábrico seguirá
con las dos toneladas de cuota cientí-
fica un año más. Es decir, permanece-
rá cerrada por tercer año consecutivo.
Una situación que desde Pescagalicia
achacan a la mala gestión del gobierno
español, por su negligencia, y al Con-
sejo Internacional para la Exploración
del Mar (ICES, organismo científico
asesor), por sus errores de cálculo.
Mediterráneo aparte, un año más,
hay algunas especies sobre las que
habrá que estar atentos para ver cómo
evolucionan, pero que a día de hoy, se
encuentran en una situación nada bue-
na. Nos referimos a la sardina, que se
halla bajo mínimos, según los datos re-
cogidos por los científicos españoles, y
la anguila, sobre la que el año pasado
la Unión Europea cerró su captura du-
rante los tres meses que abarcan su
período de migración.
Los informes elaborados por el ICES
apuntan a la necesidad de reforzar las
medidas de protección. Una serie de
ONGs reclamaba también ese incre-
mento en la protección en “todos los
hábitats” naturales de la UE y durante
las etapas del ciclo de vida de la an-
guila, al tiempo que solicitaban que se
halle entre las especies prohibidas en
la decisión de TACs y regulación de
cuotas. Hay que recordar que la Comi-
sión General de Pesca para el Medite-
rráneo (CGPM) decidió recientemente
Enero 2019 11
Mar