MagLes Revista Lésbica MagLes 14 | Bollos Campesinos | mayo/junio 2014 | Page 30

Tatuador: tu Texto: Rocío R. Wichi Muchas de nosotras hemos empezado en el mundo del tatuaje por una simple curiosidad; aunque bien es cierto que, cada vez más, este tipo de arte está a la orden del día. Antes de empezar a tatuarte, tienes que tener claras bastantes cosas, como el diseño, el lugar donde te lo harás o el tatuador que escogerás. Esto último es más importante de lo que parece. El papel del tatuador es vital. No es sólo una persona que dibuje algo en tu cuerpo, sino que es un artista deseando plasmar emociones en tu piel, una especie de psicólogo o terapeuta que debe captar tu idea y entender tu historia para reflejarla de manera fiel y creativa. El tatuador coge emociones, sentimientos y anécdotas y las transforma en algo tangible, y que, además, va a estar a la vista y de forma permanente en ti. Elegir el estudio En primer lugar, ten en cuenta el estudio donde vas a tatuarte. Debe ser un lugar limpio, con buena iluminación, preferiblemente desinfectado a fondo –incluso la camilla donde vas a reposar mientras el tatuador trabaja-. El material debe ser de un solo uso y esterilizado, y se deben usar tapones de tinta distintos para cada uno de los clientes. El tatuador es una especie de psicólogo o terapeuta que debe captar tu idea y entender tu historia para reflejarla de manera fiel y cerativa. Es bueno también que el estudio tenga una zona privada donde tatuar, que no esté a la vista de cualquiera que se asome a la tienda. Es mejor que los diseños propios del artista estén expuestos, y que los diplomas sobre su formación se encuentren a la vista. Cualquier tatuador bien formado estará orgulloso de enseñar sus diseños y su valía. El tatuador Una vez hayas encontrado el lugar ideal, debes fijarte en el estilo y trayectoria del tatuador.