MAGAZINE DE NEGOCIOS #14 OCT-NOV 2016 | Page 52

El líder es el lugar de identificación por excelencia, debe cuidar su salud mental y laboral y así, cuida también la de sus trabajadores. Un jefe deprimido, por ejemplo, repercute en toda la plantilla, por eso si un líder está rodeado de trabajadores tristes, deberá preguntarse por su propia tristeza.

Lo mismo sucede con un líder corrupto que tiene comportamientos poco éticos o incluso fraudulentos, generará trabajadores con características similares. A esto nos referimos cuando decimos que hay que cuidar la salud laboral.

Para procurar una buena salud mental y laboral es necesario el apoyo de un profesional, de ahí que haya proliferado en los últimos años la figura del coach. Si incluimos el psicoanálisis en este asesoramiento al líder ganaremos eficacia, ya que, además de tener en cuenta los aspectos conscientes que maneja el coach clásico podremos trabajar los aspectos inconscientes que se juegan en el ejercicio del liderazgo.

¿Qué queremos decir con esto de tener en cuenta los aspectos inconscientes?

Por ejemplo, que un odio exagerado a un subordinado puede estar encubriendo un sentimiento amoroso hacia él, o viceversa: una demostración de ternura exagerada puede encubrir en lo inconsciente un odio no reconocido. O una negación: “Yo no tenía intención de hacerlo”, debe ser escuchada en ocasiones como una afirmación: “tenía intención de hacerlo”, o un olvido, un lapsus al pronunciar el nombre del jefe, una torpeza que arroje la taza de café sobre los informes que un compañero tiene que presentar para la realización de un proyecto con el que es posible que le asciendan, pueden mostrar una hostilidad encubierta, celos, envidia, etc. El psicoanálisis nos enseña que las pequeñas cosas, los detalles: equivocaciones, olvidos, torpezas, etc., nos pueden hablar de los procesos inconscientes en juego. Y darnos una información de alto valor para el ejercicio del liderazgo. También es importante aprender a tolerar la hostilidad que recae sobre la figura del jefe. La revisión de la historia siempre nos enseña algo. En este sentido, es interesante estudiar lo que les hacían a los líderes en la antigüedad cuando se equivocaban, incluso a los reyes: los manteaban, los decapitaban.

LOS ASPECTOS

INCONSCIENTES