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Trabajos en extinción

Las nuevas tecnologías harán que trabajos como dependientes, atención al público, e incluso profesionales como abogados, arquitectos, economistas que no se modernicen y no hagan uso de éstas tecnologías, tiendan a desaparecer o disminuir considerablemente su campo de actuación y clientela.

Entraremos a un centro comercial y no encontraremos a un dependiente de carne y hueso. Encontraremos un robot con una capacidad de información muy superior a la de una persona, incluso analizarán nuestro interés real de compra. Dependientes y cajeros serán trabajos que con el tiempo tenderán a desaparecer.

Hacer lo que los clientes valoran y pagan...

Y no lo que a las empresas les gustaria hacer, muchas se pierden en no brindar con la Confiablidad prometida de sus productos, Integrabilidad de servicios o Calidad.

Muchas no leen y aplican su Misión, que por mal redactada o sucia pueda estar, es el Core Business el cual se debe uno disciplinarse, dejar la desidia y volverse cazador.

Existen momentos en la vida que se requiere volver a lo básico, reencontrarnos con aquella esencia que nos hizo prevalecer y ser felices...

Por Carlo Arqueros P.

Tecnologías de la información y comunicación.

Cuando la tecnología alcance altas cotas de eficiencia, la civilización tendrá que encontrar la manera de resolver ¿Cual debería ser el papel de los humanos "sobrantes" cuando nadie sea estrictamente necesario? Esas personas sobrantes, cuyos cometidos han dejado de existir, ¿moriran de hambre o llevarán una vida cómoda? ¿Quien lo decide y cómo? ¿Cómo se sustentará la economía?

Las mismas cuestiones fundamentales, planteadas de muchas formas diferentes, han dado lugar a un reducido número de respuestas, porque ¿son las únicas posibles?.

El gran desafío es como nos re inventamos cada día en una sociedad, que apunta a la eficiencia en todo aspecto de la vida, pues la obsolescencia humana nunca llegará a producirse si no se piensa de esa manera automatizada. Los datos en que se basa la automatización, deben producirse en última instacia de las personas. Antes se imaginaba que los mejores ingenieros serían los únicos que manejarían los hilos de la automatización. Ahora resulta que, para que las maquinas den la impresión de estar automatizadas, es necesario el big data, obtenido a partir de una cantidad enorme de personas.