Madresfera Magazine 18- Noviembre 2018 | Page 63

[ CULTURETA ] Silvia Nanclares aborda el deseo de ser madre en Quién quiere ser madre, una novela autobiográfica que coloca con honestidad y valentía la maternidad en primera fila de los temas literarios. POR DIANA OLIVER La maternidad ha estado arrinco- nada en la historia de la literatura, y de la cultura en general, durante siglos. Son pocas las referencias li- terarias a las vivencias maternales con voz femenina, y menos aún las maternidades relatadas en primera persona. Ser madre no era el cen- tro de las grandes historias, sino de historias secundarias, y no fue hasta mediados del siglo XX cuan- do la maternidad salió del armario y comenzamos a poder disfrutar de relatos valientes y honestos que nos hablaban de la ambivalencia maternal, de los sentimientos más humanos y de la olvidada comple- jidad de lo cotidiano. “El deseo de maternidad está cruzado por muchas cuestiones materiales, emocionales” Para Silvia Nanclares, “lo alu- cinante es que esas vivencias no estén en primera fila de los temas literarios, donde la guerra o la superación del héroe copan los primeros puestos”. La escritora, editora y activista cultural, en- cuentra la explicación en la “amplificación” que en- cuentra el sistema de valores patriarcal en la literatura. Ella también saca el altavoz y aborda el deseo de ser madre en Quién quiere ser madre (Alfaguara, 2017), una novela autobiográfica en la que cuenta cómo de- cidió quedarse embarazada a punto de cumplir los 40 y el camino que tuvo que recorrer hasta lograrlo. Bella y dolorosa a partes iguales, la novela pone la materni- dad, con sus matices y su ambivalencia, en primera fila. Dónde siempre debería haber estado. Diana Oliver: ¿Qué valor crees que aporta el yo como materia literaria cuando se habla de ma- ternidad? Silvia Nanclares: El valor de lo no dicho, de lo por decir, de lo casi virgen literariamente, casi te diría que a veces resulta obsceno, en el sentido de que nunca ha sido considerado material digno para la “alta cultura”. DO: Explorar el territorio de las madres, sus emociones, sus cir- cunstancias, sus expectativas, ¿requiere necesariamente de las mujeres que son madres? SN: A mí me gusta hablar de “lo madre”, y todas las personas estamos atravesadas por ello. Todos/as somos hijos/as. Todos cuidamos de alguien en algún momento, y sere- mos cuidados, si acordamos que el cuidado es lo que define el pensamiento y la práctica maternal (que no debería ser exclusiva de las mujeres). Pero también hay vivencias como la gestación, el parto o la lactancia de las que imagino debe ser muy difícil escribir con complejidad sin ha- ber pasado por ahí con el cuerpo. Pero el oficio de la escritura requiere de escucha y observa- ción, alguien empático y/o sensible podría hacer el trabajo de ponerse en la piel de una madre y tener éxito. NOVIEMBRE 2018 • mama • 63