Madresfera Magazine 16 - Mayo 2018 | Page 45

“No me ha interesado la crianza hasta que me he visto en un momento profesional, sentimental y económico apto para formar una familia” No sabía la cantautora Zahara la paciencia que la maternidad iba a regalarle. Tampoco cómo ser madre iba a enseñarle a vivir y a disfrutar el aquí y el ahora. Sí sabía lo duro que es ser madre, y las implicaciones que tiene a todos los niveles, por lo que esperó hasta que tuvo la situación emocional, económica y profe- sional adecuada. Es clara y honesta cuando admite que la conciliación es una utopía si no tienes una economía que te la permita. Pregunta: Tienes 33 años pero llevas haciendo músi- ca desde los 12. ¿Dirías que has podido cumplir uno de tus sueños? Respuesta: Cuando empecé era simplemente una niña que cogía la guitarra y se imaginaba melodías, todo era muy naif, muy inmediato. Era algo que me gustaba hacer, por supuesto, pero no me imaginaba viviendo de ello. Hacer canciones me permitía evadirme de mis responsabilidades, no era capaz de concebirlo como una más. Cuando terminé la carrera decidí que quería inten- tarlo, pero no porque la música fuera un sueño, sino porque por fin entendía que dedicarse a ella era un trabajo que exigía el 100% de mí y no podía compartir- lo con otro. P: Estudiaste Educación Musical pero te lanzaste a seguir el camino de intentar vivir de la música como cantautora. R. Yo quería tener una carrera y mi padre siempre me decía que con mi formación en el conservatorio y mi intuición podría trabajar de maestra y dedicarme a la música, que podría ser compatible. Yo no lo creía. Así que cuando la terminé les pedí un año para intentar- lo, un año donde no estudiase oposiciones, donde dejase la enseñanza de lado y lo intentase con todas mis fuerzas. Si no lo conseguía, si vivir de la música era imposible, entonces volvería a la enseñanza. Pero necesitaba saber si podía o no podía hacerlo. Y pude. Al principio fue más sencillo incluso. Daba pocos conciertos, ganaba muy poco, pero no tenía apenas gastos. Podía vivir con un par de conciertos en La tertulia y alguno más fuera de Granada. Lo difícil fue profesionalizarme. Empezar a girar, pagar a músi- cos, ser autónoma, invertir en el proyecto, grabarme demos… Ahí es donde constaté lo que intuía: que esto es un trabajo a tiempo completo. Y ahora que MAYO 2018 • mama • 45