Tiene 47 años, dos hijas, un perro,
una gata, ocho discos en el mercado,
cuatro libros publicados y podría
presumir, aunque no lo hace, de
liderar la banda española de indie
rock más importante de una
generación. A Santi Balmes, de
Love of Lesbian, el éxito le llegó
tarde. Quizá por eso considera que,
en el fondo, sigue siendo un outsider.
Pero, eso sí, mantiene la misma
ilusión que cuando empezó a subirse
a los escenarios hace ya 20 años.
POR PILAR CÁMARA
Una vez me dijiste que «tener una vocación tam-
bién es tener una esclavitud». En este sentido, ¿eres
esclavo desde que te alcanza la memoria o lo de
escribir canciones te llegó más tarde?
La “llamada” llegó a los 12 años, aproximadamente.
Pero a partir de entonces no hubo vuelta atrás, por
mucho que disimulara e intentara calmar a mi entorno
con pretensiones falsas de dedicarme a otro trabajo.
Este año estáis celebrando el 20 aniversario de Love
of Lesbian. Es inevitable preguntar por el balance
que haces de todo estos años…
Claramente el grupo ha pasado por tres fases: la
inicial (periodo de prueba-error), el cambio al caste-
llano, y el boom de ‘1999’.
¿Qué queda de aquel que eras entonces?
Quiero pensar que la misma ilusión, aunque, obvia-
mente, hemos cambiado, y diría que para mejor. Aho-
ra mismo estamos en el momento en el que damos
menos