Madresfera Magazine 14 - Enero 2018 | Page 76

[ SANA-MENTE ] “La etapa infantil es realmente importante para convertir la Alta Sensibilidad en un don y no en una dificultad añadida” reconoce la propia experta, “a veces se puede dar la situación de que el niño sea altamente sensible y haya sido diagnosti- cado con un trastorno, mientras que otras veces se puede creer que el niño es altamente sensible y en realidad tiene un trastorno. Incluso se pueden dar ambos ca- sos o ninguno”. Para ayudar en la identificación, desde PAS España ponen a disposición de padres y profesionales un test orientativo. Explica Pérez Chacón que exis- ten investigaciones que demues- tran la importancia de la detec- ción de la alta sensibilidad, ya que los niños se benefician “de tener una infancia y un apoyo adecuados que les permiten de- sarrollar todo su potencial y ta- lento”. Por el contrario, el crecer en entornos no adecuados, don- de predomina la incomprensión, provoca que estos niños tengan mayor probabilidad de desa- rrollar depresión y ansiedad en edad adulta. “La etapa infantil es realmente importante para con- vertir la Alta Sensibilidad en un don y no en una dificultad aña- dida”, reflexiona la presidenta de PAS España. ¿Y qué consejos dan los expertos a los padres de niños altamente sensibles? Karina Zegers de Beijl apunta a la necesidad de “pausas” en el día a día de los menores y a la no conveniencia de actividades extraescolares: “el peque PAS ne- cesita tiempo para estar a solas”. También, como avisa a los padres, que la saturación de estímulos que sufren estos niños “puede desem- bocar en rabietas”; y que acostum- bran a tener el umbral del dolor bastante bajo. “Es importante es- cucharles siempre y tomarles en serio”, añade la experta, que anima a los padres a evitar frases del tipo “es cosa de niños”, “no llores”, “esto son tonterías”, “mira Fulano, éste sí es fuerte”, “tienes que aprender a defenderte” y un largo etcétera. “Procuremos como educadores siempre darles el mensaje de que no son defectuosos, que no tienen por qué intentar ser más fuertes (ya lo son y mucho, además), que mostrar sus emociones no es algo feo o de niñas”. ■ Un don hereditario La alta sensibilidad es hereditaria, así que un hijo altamente sensible es sinónimo de que el padre, la madre o ambos lo son también. “Normalmente los padres prestan atención a las características de sus hijos y a cómo éstas están afectando a su día a día. Los padres tienen muy lejos sus vivencias de niño, pero a través del trabajo en consulta, muchos se ven reflejados y conectan con el niño que fueron. De este modo descubren que ellos son y fueron niños altamente sensibles”, afirma Pérez Chacón. 76 • mama • ENERO 2018 “Que los padres descubran que son PAS ellos mismos a través de sus preocupaciones por sus peques es bonito, ¿verdad?”, se pregunta por su parte Zegers de Beijl, que no obstante deja claro que “lo ideal” sería que esos padres ya tuviesen el conocimiento de su alta sensibilidad de forma previa “para poder acompañar bien y desde el principio a su hija o hijo sensible”. Eso sí, más vale tarde que nunca.