Madresfera Magazine 12 - Septiembre 2017 | Page 14

[ POST DESTACADO ] “Es un honor que alguien me escriba para contarme su historia porque se ha sentido tocada por algo que yo he escrito” bebé dormía. Y ese es el comienzo de algo que está tan normalizado que nadie se cuestiona. La madre es la que está con el bebé, quien tiene que recuperarse físicamente, quien (en su caso) alimenta con la teta, deja de hacer su vida normal, deja el trabajo (por un tiempo o de forma indefinida). Y la sociedad pro- mueve que seamos las mujeres quienes nos encar- guemos de todo esto. AC: ¿Cómo crees que se cambia esto? ¿Depende en parte, también, de vosotras, las madres, de que toméis consciencia de esta realidad? L: Tomar consciencia de esta realidad es primordial. Muchas personas, entre las que me incluyo, nos sen- timos engañadas cuando nos acercamos al mundo maternal. Pensábamos que podíamos tenerlo todo, hacer todo, llegar a todo… y entonces nos encontra- mos con palos en las ruedas, zancadillas y cuestas tan empinadas que no ves si quiera lo que hay al final. Para mí es importante que desde la sociedad nos ayuden con nuestras maletas. Si el papá tiene que volver al trabajo al mes de nacer la criatura quizás “no tiene sentido” corresponsabilizarse para luego tener que aprender a apañarte sola. Si decides dar lactancia materna, que recomiendan que sea exclu- siva durante los 6 primeros meses ya hay una tarea inherente a las mamás que no pueden delegar, ¿qué mínimo una baja que cubra ese periodo? Una baja para ambos. Para que puedan ser realmente corres- ponsables del cuidado de ese nuevo miembro de la familia. Que “rente” dividir las tareas de cuidado porque se van a mantener en el tiempo, para que ambos tengan que rehacer el espacio de sus male- tas por igual. 14 • mama • SEPTIEMBRE 2017 AC: ¿Qué decisiones o qué cosas has cambiado en tu vida desde que te encontraste de frente con la metá- fora de la maleta? ¿Te ha servido para dar un paso al frente y encontrar tu espacio? L: El primer paso lo di en ese mismo viaje. Dejé que mi marido hiciera la maleta para la vuelta y me fui a dormir con el peque. Es algo que nunca había hecho antes, siempre soy yo la que se encarga de hacer la maleta, es algo “mío”. Delegué la tarea por un lado y además ese rato lo dediqué a descansar. Lo nunca visto. Algo que para mí era una novedad y una fuen- te de culpa para mi chico no significó nada en abso- luto. Simplemente hizo esa tarea, nos la repartimos. Por otro lado al volver del mini viaje he decidido “sistematizar” algunas cosas en casa como, por ejemplo, preparar menús semanales, así los dos sabemos qué hay para comer/cenar, si algo se está acabando y hay que ir a comprar y no es necesario que tenga yo en mente esa información constante- mente. La carga mental es algo que habitualmente sufrimos las mujeres y no es tan visible como el