[ PROYECTOS BLOGUEROS ]
La pregunta resulta obvia: ¿Cómo debería ser esa
educación? “En mi opinión las nuevas tecnologías
han cambiado radicalmente la forma que tenemos
de aprender cosas nuevas. Hoy en día toda esa información que antes te daba un profesor o un libro está
disponible en Internet de forma gratuita. Y podemos
volver a escuchar la explicación del profesor siempre
que la necesitemos. La cantidad de cosas que podemos aprender a hacer gracias a vídeos de Youtube es
impresionante y la educación del futuro se tiene que
dar cuenta de esto. En mi opinión, ser autodidacta será
una de las competencias más necesarias en el mundo
que les tocará vivir a nuestros hijos e hijas”, argumenta.
Sus opiniones y su apuesta por la tecnología desde
pequeños como complemento educativo chocan de
forma frontal contra otras corrientes que afirman que
los niños deben pasar los primeros tres años de su
vida sin tecnología. También con la corriente de moda
entre los empleados de la ciudad de la tecnología,
Sillicon Valley, que llevan a sus hijos a colegios con
pedagogías alternativas, donde brillan por su ausencia
los dispositivos electrónicos. “No me llama la atención
que éstas propuestas educativas innovadoras atraigan
a los padres de Silicon Valley. Ellos mejor que nadie
saben que la escuela tradicional no preparará a sus hijos para el mundo que les tocará vivir”, reflexiona Flor,
que aunque es consciente de que hay instituciones y
expertos muy contrarios, afirma que también hay otros
muchos “que están a favor y no tienen tanta repercusión mediática”.
Al respecto menciona a la Fundación Faros del Hospital San Joan de Deu y cita los consejos de la Sociedad
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mama
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Americana de Pediatría: “Su recomendación es no
exponer a los niños menores de dos años a ninguna
pantalla, ni Tablet ni tele. A partir de los dos años recomiendan que el tiempo que pasan frente a las pantallas
sea de entre una y dos horas diarias, no más. También
recomiendan que existan zonas de la casa libres de
tecnología y que se apaguen todos los dispositivos
electrónicos a la hora de la cena. Además nos recuerdan que es importante incentivar los juegos al aire libre
y los que estimulen su imaginación. Yo creo que todas
estas recomendaciones son bastante lógicas y que
todos en mayor o menor medida las cumplimos”.
Beneficios de trabajar con tablets
Para la creadora de Peque Tablet, el mayor aporte
que ofrecen las tablets a los niños “es la posibilidad
de investigar cosas nuevas y aprender jugando”. En
ese sentido, recuerda que un día se dio cuenta de
que su hijo había aprendido a contar hasta
diez él solito “con solo jugar a la aplicación
Fiesta de cumpleaños de Monkimon. También
canta muchas canciones en inglés, como Daddy Fingers o The Wheels on the Bus gracias
a videos musicales que él mismo elige de
Youtube”, explica.
Y a pesar de eso, de los beneficios que nos
cuenta Florencia, el uso de la tecnología entre
los más pequeños se sigue viendo c on recelo
entre muchos padres y expertos. ¿Por qué?
“Creo que todas las cosas nuevas producen
miedo. En nuestra época el coco era la tele….
que nos iba a dejar ciegos y sin imaginación.
Así como nuestros padres se preocupaban por
la cantidad de horas que nos pasábamos frente a la tele y la calidad de los programas que
veíamos a nosotros nos pasa lo mismo con la
Tablet. Lo importante es tener claro cuál es el
límite y consensuarlo con nuestros hijos/as. En
mi opinión prohibir no tiene mucho sentido,
porque antes o después usarán la tecnología y
nuestra guía será súper importante”.
¿Y cómo ponemos esos límites? ¿Cómo podemos
controlar que nuestros hijos hacen un buen uso de la
tecnología que ponemos a su disposición? Flor hace
referencia en este sentido a las herramientas de control parental, “que nos permiten elegir a qué vídeos y
qué aplicaciones tendrán acceso y darles la libertad de
jugar con la Tablet a su aire dentro de un entorno controlado”, y también a los límites, respecto a los que nos
pone el ejemplo de lo que ha pactado con su hijo: “En
mi casa la franja horaria de uso de tablet es después
del cole y antes del baño. En ese horario la Tablet está
disponible, al igual que la tele, la pelota y los lápices
para dibujar. Cuando cenamos hay blackout tecnológico total, igual que a la hora de ir a dormir”.