Madresfera Magazine 02- Febrero 2016 | Page 34

“La sociedad la han organizado los hombres con poder y sin responsabilidad en casa” esto lo van a solucionar las mujeres con poder, las mujeres que saben que una reunión a las 7 de la tarde te parte en dos. Todas las mujeres con responsabilidad empresarial lo dicen. Y creo que serán ellas las que cambien esta dinámica del sistema tan perversa que perjudica sobre todo a las mujeres. Ya lo está haciendo, por ejemplo, Ana Botín, que no permite en el Banco Santander que haya reuniones por la tarde. Al final esa organización redunda en beneficio de todos. Por otro lado es necesaria más flexibilidad, que existan fórmulas que te permitan acumular el trabajo en tiempo libre. Eso existe. La Comisión Europea, por ejemplo, lo hace. Seamos flexibles, que aquí parece que tiene que estar todo tasado para que parezca que hacemos bien nuestro trabajo. Y luego medidas reales: con la crisis se han cerrado guarderías, se han reducido ayudas a la dependencia, se entiende que la ayuda externa en los hogares es un lujo, cuando yo creo que es una necesidad… Tienen que primar de alguna manera las ayudas públicas. Es decir, si tú tienes a una persona en casa contratada regularmente, ¿por qué no puedes obtener algún tipo de beneficio fiscal? La familia es una pyme que genera puestos de trabajo, ¿por qué no podemos entenderlo así? Yo al final me he podido organizar a costa de tener una persona en casa que me supone la mitad de mi sueldo, pero lo hago para poder trabajar, no para que me pongan un zumo de naranja por la mañana. ¿Cuántas mujeres hay que no tienen familia cerca y no llegan a todo? Familia igual a pyme y si hago un contrato, bonifíquemelo. M.M: Escribes en la novela: “Las empresas no asumen que tú asumes una responsabilidad extra cuando decides cuidar y educar a tus hijos: No se valora. Se penaliza”. ¿Qué falla en esta ecuación: el sistema, una mentalidad anquilosada de los empresarios…? S.O: La maternidad implica unas obligaciones para la empresa, un cambio de situación. Hay que revalorizar el cuidado en este país. A un hombre que pide una reducción de jornada lo miran mal. Algo tenemos que hacer. El Consejo del Poder Judicial, por ejemplo, en las oposiciones al cuerpo de letrados, da puntos a las mujeres que se han ido a cuidar de sus hijos porque entienden que han estado haciendo una labor. Nos preocupamos cuando un niño acuchilla a un profesor en el instituto, pero no nos hemos preocupado de qué forma ha crecido ese niño. Nos 34 • mama • FEBERO 2016 escandalizamos con los niños que vuelven a casa solos del colegio, pero ¿existe realmente otra opción? Hoy los niños salen del instituto a las 2 del mediodía, ¿cómo lo hacemos? ¿Quién se encarga de ese niño? Tampoco me parece, por supuesto, esas mujeres que no tienen hijos porque su empresa le va a mirar mal, porque puede perder su trabajo. No me parece. Hay que quererlo todo. M.M: No quiero ser defensor de las empresas, que parte de culpa tienen, ¿pero no crees que se podría hacer mucho más en beneficio de la conciliación desde la esfera política? S.O: No se hace apenas nada. Se han hecho cosas para las familias numerosas, para tal y cual, pero luego hay como una especie de país emergente, de clase media con uno o dos hijos, que no llegas a ser familia numerosa ni a recibir ninguna ayuda de nada. También es verdad que nos ha pillado una legislatura muy difícil por la crisis y el tema de la conciliación es el último, de los menos prioritarios. Al final se trataría de estimular a las empresas a hacer cambios en su organización que redunden en el bien de sus empleados. La sociedad la han organizado los hombres con poder y sin responsabilidad en casa. Y los horarios igual, porque les parecía genial llegar a casa con el niño ya bañado y listo para irse a la cama. Eso es lo que han hecho los tíos. Por eso confío en que esto lo cambien las mujeres. La primera mujer presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, por ejemplo, se dio cuenta al llegar al puesto de que las deliberaciones de los plenos eran por la tarde. Ella cambió esa dinámica perversa. M.M: Como consecuencia de esos horarios demenciales y de esa escasa flexibilidad que comentabas, entre otras cosas, España es uno de los países con la tasa de natalidad más baja de la UE y en el que las mujeres son madres por primera vez a una edad más avanzada. ¿Es la solución postergar la maternidad? S.O: No, no lo es. Hubo una generación, la de nuestras madres, que renunció a trabajar. Luego hubo otra, que cambió muchas cosas, pero que renunció a ser madre. Las mujeres de nuestra generación lo queremos todo. Que a ti te encante tu trabajo y tengas que renunciar a él es una jodienda, sobre todo po rque tú naciste en libertad y nadie te contó este timo. Y ese