Cuidado con los cuentos sexistas
Alejandra Guerrero Espitia
Durante generaciones, tanto hombres como mujeres, hemos sido oyentes
de los mismos cuentos, podría asegurar que en su mayoría conocemos a la
cenicienta, la bella durmiente, blanca nieves, etc.
Nos hemos educado con las ideas de los príncipes, princesas, final feliz,
amor a primera vista y demás situaciones
que habían pasado
desapercibidas por niños y niñas de generaciones anteriores.
Pero ¿en realidad son bellas y
llenas
de
felicidad
estas
historias de princesas? ¿en
realidad nos hablan de querer
a las personas no por su físico
sino por su interior, así como
en La Bella y Bestia?
A
primera vista sí. Sin embargo,
es muy interesante conocer
como
estas
historias
perpetúan los estereotipos de
género, que hoy en día
sabemos,
fomentan
la
desigualdad
e
incluso
la
violencia (principalmente de
género).
A grandes rasgos Ariel (la
sirenita) cambia su voz por
unas piernas para agradar a
un hombre con quien ni
siquiera ha entablado una
conversación; Aurora (la Bella
Durmiente) y Blanca Nieves
son rescatadas y se enamoran
del hombre que las besa
mientras estaban dormidas;
Cenicienta asi como el resto
de las “señoritas casaderas”
estaban dispuestas a ser
Una ilustración de Mamá Oca por Gustave Doré, en donde el
personaje le está leyendo cuentos de hadas a un grupo de
niños