Las personas con esta alteración de la personalidad sufren episodios paranoides –caracterizados por una excesiva suspicacia y recelo hacia las intenciones ajenas–, que les causan problemas para relacionarse.
1Cuando se den brotes de agresividad u hostilidad, dejar a la persona tranquila, para evitar que se exaspere más
2Como estrategia para llevar al paciente a terapia, puede justificarse la visita al profesional para resolver un problema del familiar que le acompaña, con el objetivo de que vaya adquiriendo confianza con el terapeuta