Manuel Area Moreira
1. Los medios o materiales curriculares son parte consustancial e integrada de las prácticas escolares. El conjunto de medios, artefactos y materiales existentes y que pueden ser usados al servicio de metas educativas, es más amplio que el concepto de material curricular, la televisión, los CD room del mercado, internet, los programas de radio, el software informático son medios de comunicación o tecnologías de la información elaborados con finalidades no precisamente pedagógicas.
2. Por material curricular entenderemos el conjunto de medios, objetos y artefactos que son elaborados específicamente para facilitar el desarrollo de procesos educativos en los centros escolares y aulas. Es decir, los materiales curriculares se diferencian de otros tipos de medios y materiales porque se diseñan y se usan para cumplir funciones vinculadas con la diseminación y el desarrollo práctico de los procesos de enseñanza y/o aprendizaje de un determinado programa o proyecto curricular.
3. Materiales curriculares no solo influyen en lo que pueda aprender el alumnado. Afecta también a los procesos de diseminación y puesta en práctica de los curriculos ya que es a través de los materiales como se le hace saber al profesorado en que consiste la filosofía y el contenido pedagógico de un programa o proyectoi curricular, y sera a través de los materiales como estos podrán implementar dichos programas en el aula.
4. Un supuesto de deficiencia, en cuanto los medios serían producidos "para proteger a los alumnos de las deficiencias del profesorado, y así asegurar, en la medida de lo posible, que el Programa sea cubierto adecuadamente y que los ejercicios sean bien enseñados"
Es decir, los alumnos podrían alcanzar los objetivos de aprendizaje del currículum, a pesar de que el profesor no esté preparado, siempre y cuando existan materiales que se encarguen de
enseñar el currículum. Es decir, son materiales elaborados a prueba de profesores.
Javier Ballesta Pagan
El término “MEDIO” es equivoco. Y lo mismo podemos afirmar cuando se le adjetiva medio didáctico, medio educativo, medio audiovisual. Algunos han reducido el tema de los medios a Ferretería pedagógica otros la han ampliado tanto que bajo el concepto de medios cabe todo. El medio ya fue definido, como “cualquier dispositivo o equipo que se utiliza normalmente para transmitir información entre personas” (Rosi, 1970: 18)
En primer lugar, conviene que nos pongamos de acuerdo sobre lo que entendemos como materiales curriculares. Asumimos, la definición propuesta por Jimeno (1991), según el cual podemos considerar como un material curricular cualquier instrumento que pueda servir como recurso para el aprendizaje o el desarrollo de alguna función de la enseñanza.
Los materiales curriculares, medios didácticos son herramientas, que en manos del docente se convierten en mediadores del aprendizaje del alumnado utilizado sistemáticamente y con criterios prefijados, facilitan además las tareas del profesor, tanto en lo que se refiere a la planificación , como al desarrollo y la evaluación del proceso enseñanza y aprendizaje.
Los materiales representan uno de los componentes fundamentales del currículum y sólo tienen sentido cuando están plenamente integrados en un proyecto curricular, tanto en su diseño como en su desarrollo. Todo proyecto curricular en la medida que es un proyecto de trabajo colectivo, debe considerar las coordenadas organizativas en las que se ha de desarrollar, así como prediseñar estrategias de incidencia sobre estas coordenadas para hacer viables las metas que se propone alcanzar como proyecto. De igual modo cualquier proyecto que se proponga actuar sobre una parcela de la realidad, y los curriculares son para ello, necesitan el apoyo de unos medios materiales que permitan incidir en el sentido deseado.
Nieves Blanco
No específica
A todos aquellos objetos, libros, o instrumentos que se utilicen en las aulas que los docentes emplean para desarrollar su enseñanza y estimular el aprendizaje de los estudiantes esto es, “cualquier instrumento u objetos que pueda servir como recurso para que, mediante su manipulación, observación o lectura, se ofrezcan oportunidades de aprender algo, o bien con su uso se intervenga en el desarrollo de alguna función de la enseñanza”.
Los materiales curriculares abarcarían toda la producción teórico-práctica disponible en materia educativa. Las diferencias entre tales “ documentos” son de tal magnitud en cuanto a su producción, sus características, su funcionalidad, su utilización y sus consecuencias, que parece poco correcto y de nuevo nada útil a efectos analíticos, incluidos todos en el mismo saco.
La promoción privilegiada de un tipo único de materiales (los libros de texto) resulta restrictiva y poco educativa. Mucho más cuando su producción esta en manos de empresas comerciales que, por serlo, se rigen por criterios no empresariales y no educativos. Potenciar las bibliotecas de aula, la introducción de otros materiales impresos existentes en el mercado, apoyar la elaboración de materiales por parte de equipos de profesores, financiar la adquisición y la utilización de otros materiales parece necesario si lo que se quiere es renovar la cultura y la práctica pedagógicas y las practicas en las escuelas y no solo regularlas y controlarlas.
Los libros de texto se convierten, de hecho y facilitado desde mi perspectiva por la legislación en auténticos proyectos curriculares.