los desastres de la guerra DESASTRES DE LA GUERRA - Goya- | Page 186

me permitió en algunos meses volver a la escuela”.

Goya, nos da una siniestra estampa compuesta de manera radical-
mente distinta a las dos anteriores. En este caso parece estar en una calle
junto a las paredes de un sólido edificio, tal vez un hospital. Los cadáveres
están envueltos para ser trasladados a enterrarse. Una mujer pasa junto
a ellos tapándose las narices, para evitar el hedor. Los cadáveres se han
convertido en fardos, en objetos de desecho. El lugar donde se apilan los
cadáveres, tenebroso, duro, compacto, de densidad escalofriante.

La mujer, por sus pasos adivinamos puede ser la madre o esposa de
algunos de los muertos. De condición humilde por su vestimenta es la única
que recibe la luz que la desvela como único ser vivo.

Un vivo en tristeza y desconsuelo, que volverá a su mundo con la
pesadez del desgarro, con la soledad de ausencias irreparables.
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