los desastres de la guerra DESASTRES DE LA GUERRA - Goya- | Page 164

humano. Convertida en harina sirvió para hacer pan y con agua caliente unas gachas con las que tratar de paliar la hambruna. Sin embargo, no siempre era bien tolerada y a veces causaba trastornos como parálisis y en ocasiones muerte. Goya nos muestra un nutrido grupo de seres “desgraciados” y ham- brientos que esperan recibir una ración. Las figuras y los rostros tienen cua- lidades pictóricas. Han superado la línea estricta del dibujo para llenarlas de plasticidad. Aquí, al igual que en el comentario de la plancha anterior, pode- mos recordar que el friso de situaciones, que Goya plasma en los desastres, se ve ampliado con las sensaciones, las emociones, los sentimientos de los personajes. Va desgranando miedo, ira, sadismo, dolor, tristeza, angustia preocupación, complacencia, egoísmo, solidaridad, amor, indiferencia, de- cepción, perplejidad, preocupación, inocencia, terror, horror,... Una galería acompañada de gestos en sus cuerpos y en sus manos que hacen de la serie un tratado sociológico y sicológico de la condición humana en situaciones límites difícilmente parangonable en la historia del dibujo. La composición crea un clima de opresión siniestra que además tiene cualidades plásticas, con arrastres impropios, hasta ese instante, del grabado. En esta plancha, Goya, vuelve a dar un paso más en el desarrollo de la técnica del aguafuer- te. 166