Los Cuentos de Beedle el Bardo Los Cuentos de Beedle el Bardo pdf | Page 11
Desesperado, el charlatán grita que la bruja se ha transformado en un
manzano silvestre. Temeroso de que Babbitty vuelva a su forma de mujer y
le acuse de la farsa, pide que el árbol sea cortado, porque así es como "se
trata a las brujas malvadas". El árbol es cortado y todos aplauden, pero
entonces se escucha una profunda carcajada proveniente del tocón, la parte
del árbol que ha quedado enganchada a la tierra. Babbitty grita que las
brujas y magos no pueden morir por ser cortados por la mitad, y para
probarlo, sugiere partir en dos al instructor del rey. Es en este momento
cuando el charlatán pide clemencia y confiesa. Le envían a la mazmorra,
pero Babbitty todavía no ha terminado con su humillación al rey. Su voz
todavía suena desde el tocón y asegura que las acciones del monarca han
provocado una maldición sobre el reino. Cada vez que hiera a un mago o
bruja, sufrirá un daño tan terrible que deseará morir. El rey está
desesperado y de rodillas, le promete que protegerá a toda la gente mágica,
incluso permitiéndoles hacer hechizos.
la cepa vuelve a reír y exige una estatua a Babbitty para recordarle al rey
su propia estupidez. El rey le promete que mandará que esculpan una
estatua en oro y vuelve al castillo. Al final, un conejo rechoncho y viejo con
una varita entre los dientes sale de un agujero entre las raíces de la cepa y
abandona el reino. La estatua de oro se colocó donde antes estaba el árbol y
las brujas y magos no volvieron a sufrir persecuciones jamás.