Los cuadernos G y H de Burdeos CUADERNOS G Y H BURDEOS REVISADO | Page 22

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agrisado y a las que en ocasiones hemos obtenido de los dibujos procedentes de la Colección Otto
Gerstenberg, hoy en el Hermitage de San Petersburgo, en o en el Boston Museum of Fine Arts
cuanto a las medidas consideramos que la más fiable de altura es la de 191 mm. por una anchura
que oscila alrededor de 150 mm.
En las pinturas y los dibujos que hizo para su propio disfrute, en la Quinta del Sordo, junto al
Manzanares, y en los álbumes, no necesitaba de autoridad alguna bajo la que acogerse, eran obras
privadas. Más lo fueron cuando marchó a Burdeos, cuando su avanzada edad y el sosiego que
allí le permitía la vida, según nos cuenta Moratín, también le ayudaba a reflexionar visualmen-
te, como siempre lo había hecho, sobre la realidad de su entorno y el pasado vivido. Este se hace
presente en los dibujos de frailes exclaustrados, procesiones y disciplinantes, también en el toro
que vuela y, desde luego, en la alegoría de una guerra que había asolado el país y su propia vida.
¿Qué criticó Goya?, ¿satiriza los procedimientos de transporte, a los locos, a los frailes, a los saltim-
banquis?, ¿satiriza a los mendigos, a los bailarines? Creo que no siempre. Hay momentos de ternura y
delicadeza en las que se siente unido especialmente a los seres que dibuja, también hay comprensión
para actitudes morales no comúnmente aceptadas en aquel instante como el lesbianismo, la repro-
bación y la condena no están ausentes. Goya es demasiado plural demasiado extenso y en cada dibu-
jo podemos incluso ver explicaciones contrapuestas dependiendo de la óptica en que nos situemos.
Es calidoscopio plástico, floración permanente, sorpresa y más. Pero es hora de ir al meollo, sus dibujos.