Hace muchos años en Arabia Saudita vivían dos hermanos llamados Jasín y Amín.
Un cierto día, ellos paseaban por las calles de su ciudad y de repente, se encontraron con un amigo que les contó sobre dos chicas que estaban muy enfermas. Sus nombres eran Jana y Delia.
Sin pensarlo demasiado, los dos hermanos fueron a visitarlas. Al llegar allí ellas les dijeron que necesitaban el Bastón de la Cobra para salvarse con su magia y así no morir.