Liderazgo y Experiencia Médica Edición 35 Octubre 2015 | Page 24

Promoción de hábitos saludables (dieta sana, actividad física, libres de adicciones en medios masivos, digitales, a grupos y de manera individual Salud Cardiovascular y Hábitos Saludables (3) Si bien las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la principal causa de muerte en todo el mundo, existe consenso de que hasta un 80% podrían prevenirse con hábitos o estilos de vida saludables. Los principales factores asociados a las cardiopatías son una dieta poco saludable, la inactividad física, el consumo de tabaco y el consumo nocivo de alcohol. E n las últimas dos décadas, los países de mayores ingresos han documentado el impacto que tienen tanto la reducción de los factores de riesgo como las mejoras en la atención médica en la prevención de la incidencia y mortalidad por ECV. En Reino Unido, por ejemplo, el 58 por ciento de la reducción total de la mortalidad por ECV se atribuye a la disminución de factores de riesgo en la población. Experiencias similares se han publicado por Finlandia y otros países. Recientemente, un reporte del Banco Mundial señala que la menor prevalencia de factores de riesgo ha disminuido en 49 por ciento la mortalidad por cardiopatías mientras que al tratamiento se atribuye 41 por ciento. Sin embargo, dicho reporte precisa que algunos países pueden beneficiarse más que otros en la reducción de factores de riesgo y esto también es aplicable a lapsos particulares de tiempo. Lo más importante es que la reducción de muertes por ECV podría ser mayor si no fuera por el aumento en la prevalencia de obesidad y diabetes que juntas podrían disminuir hasta un 18 por ciento la estimación de muertes prevenibles o pospuestas. Vale la pena mencionar que en los países de la OCDE en promedio la diabetes y las ECV causan el 5.2 por ciento del total de años perdidos por discapacidad, mientras que en México causan el 8.1 por ciento. Otra variable a considerar es el hecho de que hay una distribución desigual de factores de riesgo y de acceso a los servicios de salud, así como a 22 un mayor nivel educativo que el resto de la población, ya que 39.8 por ciento tiene estudios de secundaria o más, mientras que los no derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social tienen 23% por ciento. En la comparación de los resultados de las ENSANUT 2000 con 2012, algunos resultados son tratamientos de calidad, de tal manera que los grupos con menor ingreso se ven más afectados. En el IMSS, una estabilización de la mortalidad por cardiopatía isquémica al final del siglo XX y la ligera tendencia descendente observada en los últimos años se atribuye también a los avances en la atención, así como a la probable disminución de factores de riesgo. Sin embargo, para apoyar esta afirmación queda pendiente identificar cuáles son los grupos en los que se ha alcanzado un mayor logro con los programas de prevención, entre ellos PREVENIMSS. El riesgo atribuible de mortalidad por ECV para los principales factores de riesgo es el siguiente: •► Hipertensión 13 por ciento; •► Tabaquismo 9 por ciento; •► Hiperglucemia 6 por ciento; •► Inactividad física 6 por ciento; •► Sobrepeso/obesidad 5 por ciento. Uno de los factores más estudiados es el tabaquismo, un factor que puede ser totalmente evitable; en las ECV el beneficio de dejarlo entre los 35 y 44 años de edad iguala la tasa de sobrevida de exfumadores con los que nunca fumaron. El perfil de riesgo de la población derechohabiente De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición ENSANUT 2012, el perfil de los derechohabientes del IMSS muestra que el 86.8 vive en áreas metropolitanas o urbanas de más de 5,000 habitantes y que tienen UMAE Hospital de Cardiología CMN Siglo XXI, IMSS LATIENDO JUNTOS, A TODO CORAZÓN