LICEO ANTIOQUEÑO DE LA UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA LICEO UDEA | Page 69

De Liceo a Ciudadela Universitaria. Historia de la sede de Robledo de la Universidad de Antioquia Se esperaba inaugurar la piscina el día clásico del Liceo Antioqueño, 30 de marzo, que en 1971 cumplía 70 años, pero la obra no se alcanzó a terminar. Se inauguró entonces el viernes 9 de julio de 1971 a las 4 de la tarde, con algunas exhibiciones deportivas. Una vez en funcionamiento, dado que el uso no sería exclusivamente para la enseñanza, todos querían disfrutar de la piscina del Liceo. Don Hernando Sánchez Eusse también lidió algunos años con su administración y con la gestión de las obras complementarias. Algunas reparaciones En el informe anual de 1965 presentado por el director del Liceo, Don Antonio J. Villa Villa al rector de la Universidad, Doctor Ignacio Vélez Escobar, registra las siguientes obras: Pintura de toda la sede. Reconstrucción de la pasarela entre los pabellones A Primer Año – H Cafetería. Refuerzo de la pasarela entre los pabellones C Tercer y Cuarto Años - G Capilla. Obras de defensa en el pabellón E Administración y Servicio Médico. Impermeabilización a las losas de cubierta, especialmente del pabellón E. Aplicación de ceramita en áreas faltantes. Construcción de una nueva oficina para la Dirección. Construcción de un aula para Ciencias Naturales en el pabellón del Servicio Médico. Construcción de tres aulas para artística y manualidades y una para mecanografía en el sótano del pabellón H. Igualmente reparaciones a los baños, pintura e iluminación en este mismo pabellón. Reforma a la oficina de Educación Física. Adecuación de salones para la Banda de Guerra, Boy Scouts e implementos de Educación Física. Construcción de escalas entre el pabellón G y los baños del sótano del pabellón H. Construcción de escalas entre la cancha y el patio para los buses. Construcción de jardineras y protección para los árboles. Reparaciones en sanitarios y baños. Instalación de setenta lámparas fluorescentes en aulas y oficinas (faltando aún 250). Mobiliario, tableros, carteleras. Liceo anexo Lucrecio Jaramillo Vélez, El Lucrecio Un cambio importante en el Liceo, luego de su traslado a Robledo, fue la adopción de la jornada continua en beneficio de la comunidad liceísta, pues con ella no necesitarían desplazarse a la sede dos veces por día. Aunque había gran cantidad de lo que ahora se denomina actividades extracurriculares, la sede permanecía libre toda la jornada vespertina. Con el fin de optimizar el espacio, en 1966 se firmó el comodato para el funcionamiento del Liceo Lucrecio Jaramillo Vélez, llamado también Anexo, que funcionó en la jornada de la tarde hasta 1987, cuando fue trasladado al barrio Belén, en el suroccidente de la ciudad. Las oficinas del 69