La decisión del tribunal llegó luego de una opinión consultiva formulada por el gobierno de Costa Rica y certifica en un fallo de 87 páginas que "la orientación sexual y la identidad de género son categorías protegidas por la Convención Americana de Derechos Humanos", y según la Corte, para cumplir con ese derecho, "podría ser necesario que los Estados modifiquen las figuras existentes a través de medidas legislativas, judiciales o administrativas para ampliarlas a las parejas constituidas por personas del mismo sexo".