LETRINA LETRINA # 10 Noviembre - diciembre 2013 | Page 18

ODISEO EN COMALA El soplar del viento era fuerte pero hacía mucho calor, la luz del sol casi no lo dejaba abrir sus ojos. Cuando lo hizo vio cómo el polvo se levantaba y dejaba una pequeña nube amarillezca por el correr del animal. Se detuvo el caballo y un hombre bajó. Él se sintió amenazado. —¿Quién eres? —exigió Odiseo mientras veía a ese hombre acercarse con paso lento—. Eres alguien muy extraño, no conozco hombres como tú. ¿Y por qué está \