Cuando fuimos a Rayones, uno de los lugares que visitamos fue una casa donde vendían plantas y mezclas de éstas que ayudan a nuestra salud. Cuando fuimos al lugar, la dueña no estaba pero estaba su hijo Reynaldo de la Fuente, quien aceptó sentarse a hablar sobre algunas propiedades curativas de las plantas y muchas de sus interesantes experiencias propias. El señor Reynaldo estudió sobre plantas medicinales en un vivero en Estados Unidos. Hablamos mucho tiempo con él, pero lo que más nos interesó y sorprendió fue el hecho de que él antes pesaba 130 kilogramos, y le dio un infarto. Para curarse de su enfermedad, lo único que hizo fue empezar a tomar un té de hojas de olivo todos los días. El señor Reynaldo lleva 15 años tomando el té de hojas de olivo, ya que éste le destapó las arterias tan llenas de grasa. Además de sus experiencias propias, nos empezó a contar algunas de las propiedades curativas de la semilla de chabacano, por ejemplo, que él dice que contiene la vitamina B15 que el cerebro necesita cuando una persona tiene Alzheimer. Otra de las cosas de la que más nos habló fue del aceite de coco. Reynaldo nos dijo que el aceite de coco contiene ácidos grasos de cadena medio, que es lo mismo que la leche materna contiene, y es muy importante en el desarrollo de cualquier niño. De hecho, esos ácidos son lo que los creadores de leche industrializada (leche en polvo que sustituye la leche materna) han tratado de encontrar por muchos años, sin lograrlo. El señor de la Fuente también nos dio algunos tips de salud, como que el bolo alimenticio se debe masticar 25 veces antes de tragarlo y que no se debe hablar ni distraerse mientras se come. Otras cosas que nos dijo fueron que el bicarbonato de sodio ayuda con el estreñimiento (mientras se cuide la flora intestinal con probióticos) y que se puede hacer una hidroterapia de colon tomando agua en una gran cantidad y desechándola.
Por Paola González
Shampoo elaborado con plantas medicinales adquirido en Rayones.
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Foto por Fernanda Sánchez