Las-huellas-de-la-vida-teaser | Page 7

DEDICATORIA A los pueblos del Pallars, en Lleida, cuyos parajes he recorrido y admirado, y a sus habitantes por las amistades iniciadas y el aprecio recibido, en especial en Vilamitjana, Llimiana, Suterraña, Isona y Tremp. A las poblaciones de las tierras de Extremadura, donde mis paisanos de Porto de Sanabria, Zamora, eran acogidos, año tras año, en la actividad del pastoreo trashumante durante los difíciles tiempos de los siglos XIX y XX. A los pueblos gallegos de los Concellos de A Veiga y de Viana do Bolo, en la provincia de Ourense, cuya buena vecindad con Porto ha dado lugar a una fructífera relación de intercambio comercial, basada en la confianza mutua y en la honradez, y a una hermandad de personas inestimable. Y, sobre todo, al pueblo de Porto, que es el origen y la causa de la relación con los pueblos citados y de lo que se narra en este libro, como homenaje a su gente y a sus antepasados, por los principios que han encarnado allí donde los llevó la vida: sacrificio, afán de superación y el trabajo bien hecho, con espíritu de equipo y cooperación social.