Capítulo vi
“TRABAJA DE TAXISTA”
UN DÍA MIENTRAS CACHO VOLABA CONTEMPLANDO LA CIUDAD, MIRABA DESDE ARRIBA LOS EDIFICIOS, LAS COPAS DE LOS ÁRBOLES Y LA GENTE QUE PARECÍA HORMIGUITAS DE TAN CHIQUITAS QUE SE VEÍAN DESDE ARRIBA. ENTONCES PENSÓ: ¡QUE DIVERTIDO SERÍA COMPRAR UN AUTO PARA VER DE CERCA LA CARA DE LOS CHICOS Y PARA PASEAR CON VALERIA Y LLEVARLA A TOMAR UN HELADO LOS DÍAS DE CALOR Y UN CAFECITO LOS DÍAS DE FRÍO!
FUE A SU NIDO, DONDE GUARDABA SU ALCANCÍA Y CON ALGUNOS BILLETES Y MONEDAS ELIGIÓ UN AUTO AMARILLO Y NEGRO COMO SUS COLORES, UN TAXI.
Y ASÍ FUE COMO COMENZÓ A SER TAXISTA. LE GUSTABA MUCHÍSIMO ESA PROFESIÓN PORQUE DE ESA FORMA PUDO CONOCER MUCHAS PERSONAS QUE AL VER UN PAJARITO AL VOLANTE NO DEJABAN DE SORPRENDERSE Y DE SACARSE FOTOS CON ÉL. ASÍ SE FUE CONVIRTIENDO EN EL BENTEVEO MÁS FAMOSO DE TODA LA CIUDAD.
ESTÉN ATENTOS CUANDO SALGAN DEL JARDÍN Y VEAN PASAR UN TAXI. SEGURO ALGÚN DÍA VEN A CACHO MANEJANDO FELIZ Y SILBANDO SU CANCIÓN: SOY CACHO DE BUENOS AIRES.