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Realidad Nacional
Columna de Opinión: David Hermosilla
H
ace ocho años atrás, Diana
Sacayan
celebraba
la
conquista alcanzada a través de
la Ley de Identidad de Género,
para la cual había militado
incansablemente, y que le había
permitido obtener el DNI que
reconocía su identidad. Mientras
brindaba una entrevista televisiva
en el programa 678, el por
entonces periodista económico
del diario LA NACION, Nicolás
Dujovne, se burló de ella por las
redes sociales y reclamó para que
“no nos secuestren los chistes
fáciles”.
omo si de chistes se tratara,
tres años después, Diana fue
asesinada de trece puñaladas por
Gabriel Marino, que hace poco
más de un mes fue condenado
a prisión perpetua en un fallo
histórico que lo señaló como
responsable del travesticidio de
Sacayan, sentenciándolo por
la figura penal de homicidio
agravado por odio y violencia de
género.
l odio de género, el mismo que
empieza con un chiste, termina
en tragedia cuando se lo impone
como sentido común desde
aquellos que lo replican con la
masividad que la concentración
mediática les autoriza. Dujovne
borró el comentario en twitter, lo
que no puede borrar es el cinismo
con el que una sonrisa pretende
esconder el odio.
n la sonrisa de Dujovne ante
cada anuncio relacionado
con el acuerdo llevado adelante
con el FMI se esconde el odio
que unas pocas familias, las
que se vienen enriqueciendo
escandalosamente con este
Gobierno, le tienen a las mayorías
populares que producen la
riqueza que ellos concentran.
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La Usina
Dujovne ha dejado el periodismo
y los chistes fáciles en el pasado,
pero para transformarse en el
autor de una tragedia para el
futuro de la Argentina.
laro ejemplo en nuestra Santa
Cruz, donde han puesto en
jaque nuestra industria y nuestros
recursos, a través de no reactivar
la obra pública y de generar
ahogo financiero.
l Gobierno de Mauricio Macri
es una tragedia cotidiana.
Han fabricado una crisis que
presentan como cambiaria, pero
que significa una depredación
constante del salario real, de
las jubilaciones y los ingresos
populares en general. Cada peso
que aumenta el dólar, es un peso
menos en tu bolsillo, y es un dólar
más en los grandes bancos, en
la banca internacional, y en las
sociedades que han dedicado
sus ganancias a los negocios
vinculados a la fuga de capitales
y la extorsión a la Argentina con
los intereses de la deuda externa.
Luis “Toto” Caputo se especializa
en ese tipo de negocios, y lo
imponen en el Banco Central
como si eso se tratara de un
cambio para mejorar la política
monetaria.
oner a Luis Caputo en el Banco
Central es como otorgarle
al lobo la protección integral
de las ovejas. Sus propuestas
monetarias sólo apuntan a
profundizar la fuga de capitales,
resolver los problemas de divisas
ampliando la emisión de bonos
y títulos de deuda, y financiar la
salida de las LEBACs garantizando
negocios al sistema financiero. El
acuerdo con el FMI sólo apunta
a ingresar dólares para que unos
pocos se lo apropien y lo fuguen
con la excusa de resolver una
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crisis cambiaria que ellos mismos
generaron. Un escándalo que
sólo puede esconderse detrás
de un pensamiento único que
legitime semejante bestialidad.
icha bestialidad es el masivo
desempleo
generando
en nuestra cuenca petrolera,
donde las operadoras tienen
libre albedrío para jugar con los
intereses de nuestros hermanos
santacrucruceños, las excusas de
los retiros voluntarios que a corto
plazo nos deja con un nivel de
desempleo que deberá o no, ser
absorbido por el Estado provincial
como política de estado, de un
gobierno peronista que no deja
gente en la calle.
ada día que pasa con Mauricio
Macri en el Gobierno,
la soberanía energética de
nuestro país queda en manos
de los amigos personales del
Presidente. Marcelo Mindlin,
controlante de Edenor, y
Nicolás Caputo, controlante
de Edesur, están garantizando
ganancias escandalosas junto a
las multinacionales con las que
cartelizan su negocio, financiadas
con el tarifazo que castiga el
bolsillo de todas y todos.
arifazo que en esta tierra
del sur, nuestro lugar, el
gobierno de la provincia se
atribuye el mayor de los impactos
económicos para que no sea
trasladado en su totalidad al
vecino.
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