La Oropéndola nº1 Vol 1 Junio 2015 | Page 30

La Oropéndola, la revista de divulgación de aves de Costa Rica Vol. 1 núm 1. Junio 2015 Los guías que están leyendo esto saben a lo que me refiero cuando tenemos que recordarle al observador cuál ave, cuándo y cómo se vio: "aquel pajarito marrón perchado, que tenía una chicharra en el pico y lo golpeaba fuertemente contra el bejuco, -¿se acuerda?". 7- Condición física, no necesariamente se tiene que tener el cuerpo de los Espartanos de la película "300", pero dependiendo del tipo de cliente que se maneja tenemos que ser capaces de hacer una caminata fuerte, soportar el sol, la lluvia, los mosquitos, la sed, el hambre, el sueño y el cansancio. "Primero encontramos ese pájaro y luego comemos". Tener la capacidad de levantarse temprano, acostarse tarde y estar listo para continuar a primera hora el día siguiente. 8- No tener miedo a equivocarse o a decir "no sé", creo que esto aplica para todos los guías de turismo en general. Muchas veces - más de las que desearía - me he encontrado en la situación de no poder identificar un canto y tener que decir "No sé". A mi criterio eso no lo hace a uno un mal guía , prefiero decir no sé a inventar algo y poner mi credibilidad en juego. Si puedo sacar la foto o grabar el canto, algún colega podrá ayudarme con la identificación. 9- Ser capaz de trabajar en circunstancias de estrés, saber improvisar si no se encuentra un ave deseada, si las condiciones del tiempo no ayudan, o inclusive ser muy paciente si el cliente con el que se está trabajando es difícil. Poder ofrecer alternativas para los clientes, solucionar problemas sobre la marcha y mantener siempre una buena aptitud ante las vicisitudes que se presentan en el oficio. 10- Tener buenos contactos y relación con colegas y observadores a lo largo y ancho del país y por qué no fuera de las fronteras. La observación de aves permite crear vínculos de amistad y compañerismo con otros amantes de las aves, en el caso de los guías esto es de vital importancia para contar con información actualizada y de primera mano. Hoy en día con las redes sociales es fácil transmitir la información y crear estas alianzas. Extra Salir a pajarear cuando no se está guiando, en la medida de lo posible dedicar ratos libres a las pajareadas, buscar especies raras o deseables, salir a conocer y pajarear en nuevos destinos, esto además de ser un pasatiempo es una inversión. Entre más lugares y diferentes ecosistemas se conozcan, más preparado estoy para eventuales clientes y sus requerimientos; "que quiero ver especies de bosque seco, alturas, manglares, costeras; ¡sí señor claro que lo puedo acompañar!". Saber cuál es la percha del Momoto Pico Quilla en Arenal, dónde hacen lek los “Toledos” en Rincón de la Vieja, a qué hora llegan las Cotingas al puente del Río Rincón en Osa, todo ese conocimiento sirve cuando se está trabajando. acá expongo, estoy seguro que podrán agregar muchas cosas más. Una profesión que nos permite mostrar a las personas estas bellas criaturas tan impresionantes y cautivadoras, un trabajo que nos da tantas alegrías y que en tantísimas ocasiones nos recompensa con cosas tan gratificantes como ver las lágrimas de alegría de un cliente europeo al ver su primer colibrí, de una persona que logra su tan esperada fotografía del Quetzal, o la alegría de aquella persona que viajó miles de kilómetros para encontrar esa especie que faltaba en su lista. Ser un guía de observación de aves es esto y mucho más, así que espero que los colegas que lean este artículo se identifiquen y concuerden con lo que 30 ¡Feliz pajareada a todos! Diego Quesada es Bachiller en Manejo de Recursos Naturales y además forma parte de forma voluntaria de la Junta Directiva de la Asociación Ornitológica de Costa Rica. Este año además asume el reto de ser coordinador nacional del Proyecto “Puntos de Conteo de Aves Residentes” de la AOCR. https://conteodeavescr.wordpress.com/