Migración
La migración es un proceso que ha venido marcando la historia de nuestro
país así como la relación con Estados Unidos. En este proceso la ilegalidad
con que algunos connacionales ingresan en el país vecino ha sido una
característica que se propaga en todo el fenómeno. Podemos decir como lo
establece Celestino Fernández (1988) que la historia de la migración mexicana
a los Estados Unidos es, en cierta medida la historia de la migración de los
Estados de Michoacán, Jalisco y Guanajuato. De esta forma suponemos que al
hablar de la migración mexicana en el siglo pasado estamos hablando de
alguna forma de la migración que vivió Michoacán en esas fechas.
El movimiento migratorio de México a Estados Unidos se inicia durante el siglo
XIX, en 1948, cuando se estableció la división fronteriza, separando a las dos
naciones, sorprendiendo a muchos compatriotas quienes debieron tomar la
decisión de quedarse a vivir en los terrenos que ahora pasarían a formar parte
de los Estados Unidos, o bien, transportarse hacia el sur a los espacios
mexicanos. Sus antecedentes más remotos se encuentran en las tentativas
oficiales de poblar las áreas del norte de México que siempre había procurado
el gobierno: los intentos de colonización de Texas en 1819 y de California en
1837. La residencia temporal o definitiva de mexicanos que se encontraban
más allá del río Bravo, y los constantes viajes de los arrieros, formaron la
primera red de relaciones sociales que comenzó a facilitar el establecimiento
de un circuito migratorio entre México y Estados Unidos. En 1845, la
construcción del ferrocarril, la expansión de los ranchos en California y el
aumento de la producción de frutas de las décadas entre 1850 y 1880 trajo
consigo la necesidad de importar mano de obra mexicana. El gobierno
norteamericano no había impuesto restricciones migratorias hasta 1882 por dos
motivos: primeramente por que poseían una política de puerta abierta,
transformando a Estados Unidos en un país de oportunidades para todos.
Segundo, porque la economía estadounidense tenía la capacidad de absorber
toda la mano de obra inmigrante que llegara al país. Sin embargo, en el mismo
año el Congreso estadounidense dicta restricciones a la economía China,
siendo sustituida por inmigración de trabajadores mexicanos. Fue hasta 1983
que se implementó la Alien Contract Labor Law con el objetivo de prevenir que
la mano de obra extranjera reemplazara a los trabajadores Anglos. Sin
embargo, a pesar de esta ley migratoria la economía norteamericana seguía
requiriendo mano de obra mexicana hasta las primeras décadas del siglo XX.