Maderas duras: cuyos árboles tienen hoja caduca. Ej: roble, castaño, nogal, olmo, caoba. Madera compacta, poca resina y escasos nudos, amplia gama de colores, de mayor densidad, de
crecimiento lento (anillos anuales muy juntos, casi no se diferencian), más difíciles de trabajar, y
en general de mayor calidad y precio.
Se emplean en trabajos de ebanistería, muebles más compactos, instrumentos musicales,
interiores de barco, andamios de obra,…