LA LATINOAMÉRICA DEL FÜHRER La Latinoamerica del Fuhrer PDF | Page 39

LATINOAMÉRICA DEL FÜHRER
El temor a ser algo mejor es un concepto de razas inferiores. El resquemor y la
aversión al escuchar, al ver o al leer algo referente al Nacionalsocialismo de la
Alemania Nazi; mientras que estamos prestos a temas banales como los
chismes de farándula, quien sí o quien no se hizo cirugías plásticas, quien gano
el reinado nacional de la belleza, las fiestas, las aberraciones, el alcohol, las
drogas y todo aquello que nos impide despertar, son los temas que más
interesan. Y lo que deja alguna enseñanza, lo que nos exige y nos trae una
propuesta de mejoramiento es censurado. Estamos en una involución total, con
el sentido distorsionado de lo que está mal y de lo que está bien.
El Nacionalsocialismo es el camino hacia el mejoramiento como seres
humanos y la evolución a nivel espiritual para llegar a ser ese súper hombre
con voluntad de acero, capaz de cruzar los paradigmas establecidos por una
sociedad enferma que amenaza con gobernar nuestras vidas impidiendo la
liberación del espíritu y el desprendimiento de la materia.
Veremos más adelante todo lo que llevo a Alemania y a su población a ser una
sociedad evolucionada y organizada, basados en los estándares nacionalistas
y de virtud.
El Escape del Fuhrer.
Pero seguiremos por el momento esclareciendo la historia para saber qué fue
lo que sucedió en el Bunker de Adolf Hitler y cómo fue su elaborado escape.
Tras la caída Nazi en Berlín en Mayo de 1945 el Mariscal Doenitz anunció por
radio Hamburgo que Hitler había caído heroicamente. Los medios de prensa
hegemónicos difundieron la noticia. La versión más conocida es que el Fuhrer
se suicidó junto a Eva Braun. Veinticuatro horas después de la caída, un
departamento especial del ejército soviético denominado Smerch comenzó la
búsqueda de Hitler y demás jerarcas Nazis. Los agentes comunistas rastrillaron
la zona, reunieron todas las pruebas de restos humanos que hallaron y
declararon que ninguno pertenecía a Hitler. Pocas horas después Joseph Stalin
denuncio al mundo que Hitler se había fugado, sin embargo en 1958, pocos
años después de la muerte de Stalin el gobierno ruso cambió su versión y
anunció que tenía en su poder la única prueba física de la muerte de Hitler.
El fragmento de cráneo con un agujero de bala, supuestamente descubierto
entre los restos humanos calcinados en las cercanías del Bunker.
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