LA GACETA DEL ENRIQUETA Nº 6 | Page 20

LA MÚSICA EN LA EDUCACIÓN INFANTIL La música se introduce en edades infantiles debido a la importancia que representa en su desarrollo intelectual, auditiva sensorial, del habla y motriz, es un elemento fundamental en esta primera etapa del sistema educativo. El niño empieza a expresarse de otra manera y es capaz de integrarse activamente en la sociedad, porque la música ayuda a lograr autonomía en sus actividades habituales, asumir el cuidado de sí mismo y del entorno, y ampliar su mundo de relaciones. Con la música, la expresión corporal del niño se ve más estimulada. Utilizan nuevos recursos al adaptar su movimiento corporal alos ritmos de diferentes obras, contribuyendo de esta forma a la potenciación del control rítmico de su cuerpo. La música tiene el don de acercar a las personas. El niño que vive en contacto con la música aprende a convivir de mejor manera con otros niños, estableciendo una comunicación más armoniosa. A esta edad la música les encanta. A través de la música, el niño puede mejorar su coordinación y combinar una serie de conductas. Escuchar distintos tipos de música, les ayudará a aprenderla, a reconocerla y a disfrutarla. La etapa de la alfabetización del niño se ve más estimulada, a través de las canciones infantiles, en las que las sílabas son rimadas y repetitivas, y acompañadas de gestos que se hacen al cantar, el niño mejora su forma de hablar y de entender el significado de cada palabra. Y así, se alfabetizará de una forma más rápida. La música es beneficiosa para el niño en cuanto al poder de concentración, además de mejorar su capacidad de aprendizaje en matemáticas. Además, facilita a los niños el aprendizaje de otros idiomas, potenciando su memoria. La educación musical temprana, que comienza en niños de 2 a 5 años, tiene como objetivo el descubrimiento y desarrollo de las capacidades expresivas, musicales y psicomotoras del niño. Se trabaja el desarrollo de la voz. El contacto con las fuentes sonoras a través de materiales diversos: objetos e instrumentos. El reconocimiento y la representación del sonido respecto a su duración, intensidad, altura, timbre, etc. El desarrollo de la percepción auditiva. La utilización del movimiento como medio de expresión y sensibilización motriz, visual y auditiva, para conocer el propio cuerpo, desarrollar el sentido rítmico y fomentar las relaciones sociales. Mª Soledad Trillo Profesora de Primaria 19