LA ECONOMÍA DE MÉXICO EN EL TLCAN: BALANCE Y PERSPECTIVAS FRENTE AL T VOLUMEN 19-LA ECONOMIA-VERSION DEFINITIVA-17-MAYO- | Page 432

LA INDUSTRIA MANUFACTURERA MEXICANA EN EL MARCO DEL TLCAN
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Inversión y productividad en el sector manufacturero
El auge exportador y el crecimiento del sector manufacturero, especialmente
de los subsectores con mejor desempeño en los mercados externos, han
sido resultado de un proceso de apertura externa subordinado a las estra-
tegias globales de las empresas transnacionales, que han reubicado sus
plantas de ensamblaje intensivas en mano de obra poco calificada en paí-
ses con estructuras de costos bajos, especialmente los salariales. Esta ten-
dencia se reforzó para México por su privilegiada ubicación geográfica
como plataforma de exportación a Estados Unidos.
El desarrollo de las estrategias de las transnacionales hacia México pue-
de ser analizado mediante las entradas de Inversión Extranjera Directa
(IED). Mientras la IED total recibida por la economía mexicana representó
sólo el 1.1% del PIB en 1982-1993, en 1994-2000 se duplicó y en 2001-
2007 se triplicó, disminuyendo sólo levemente en 2008-2016 (cuadro
5). La manufactura atrajo más de la mitad de la IED total durante el TLCAN.
La IED representó más de un tercio de la Formación Bruta de Capital Fijo
(FBCF) en 2003-2007 y casi una cuarta parte en 2008-2015; además, la
mayor parte fueron inversiones nuevas. Destaca, entonces, la importancia
de las transnacionales extranjeras en la transformación de la estructu-
ra productiva del sector manufacturero durante el periodo neoliberal. La
IED se dirigió a dos tipos de subsectores. Por un lado, a los de exportación
—equipo de transporte; computación, electrónico y eléctrico; y metálicos,
maquinaria y muebles—, que concentraron casi la mitad de la IED sectorial
(cuadro 5). Por otro lado, a tres de exportación menos dinámicos —ali-
mentos, bebidas y tabaco (alimentos); metálicas básicas; y químicos, plás-
ticos y caucho— que también recibieron alrededor de la mitad de la IED,
lo que refleja el interés de las empresas extranjera en la rentabilidad de
segmentos orientados al mercado interno. Los subsectores que mostraron
mayores proporciones de IED a FBCF en 2003-2015 fueron: metálicas bá-
sicas; alimentos, bebidas y trabajo; minerales no metálicos; químicos, plás-
ticos y caucho; y equipo de transporte. Así, la IED ha contribuido a un
proceso de inversión bastante dinámico en el sector manufacturero desde
2003 (cuadro 5). La manufactura concentró alrededor de una quinta parte
de la inversión total y la tasa de inversión —formación bruta de capital fijo
(FBCF) en relación con el Valor Agregado Bruto— estuvo por encima del
promedio de la economía en 2003-2007 y, especialmente, en 2008-2015.
El crecimiento de la productividad en el sector manufacturero fue diná-
mico en comparación con el conjunto de la economía durante las primeras
tres etapas de la apertura (cuadro 4). Aumentó a tasas promedio anual de
1.5% en 1982-1993, 2.9% en 1994-2000 y 2.4% en 2001-2007, tasas alre-