Al lado del desarrollo que ha surgido alrededor de la cerámica (siglo XX), nos
encontramos frente a una discusión respecto a la connotación artística del
cerámica, dando lugar a una dualidad entre arte decorativo y el arte como tal. Y
aunque entramos en callejones sin salida, por la delgada línea que existe entre
ambos, lo que se quiere resaltar en este artículo es el valor del material, junto a
sus resultados estéticos, simbólicos, conceptuales y funcionales.
Sin importar si está en un museo, si fue realizado por un ceramista, una pieza en
barro contiene, no sólo las características históricas y ancestrales que
mencionamos antes, sino que contiene factores estéticos invalorables. El material
por si solo es ya una obra de arte, las herramientas humanas le dan forma, color,
tamaño, textura y un uso, sea este expresivo o utilitario.
Órganos, De la Serie Estructura de la Vida/ Rina Peleg/ Arcilla