La palabra mercado se usa para definir un ambiente para el conjunto de las demandas y ofertas respecto de
las mercancías, ubicadas en un mismo escenario que comúnmente no es el lugar físico, sino el espacio
temporal, de oportunidad, interacción que les permite estar en contacto para realizar las operaciones
comerciales.
Algunos mercados son muy formales, otros poco o nada, otros más cambian continuamente. Algunos
permiten el libre ingreso de cualquiera que se presente como vendedor o comprador, otros tienen reglas de
admisión más o menos severas, otros no admiten más que un solo vendedor y un solo comprador, es posible
que todo esto dependa de decisiones privadas, o de leyes y reglamentos públicos.
Lo importante del mercado, mas allá de su integración, en su función, que en primer
lugar consiste en el ser el medio principal para determinar el precio de los productos a
través de esa interacción de los sujetos oferentes y demandantes, que en un sistema
libre de controles como el nuestro, motivado por el interés de las personas en el
producto, permite mover ese precio dentro del margen dictado por el interés de las
personas.
La palabra mercado en la ciencia económica se ha
trasformado como consecuencia de la división del
trabajo, que especializa a los productores y hace
necesario el contacto y comunicación de los diferentes
productores y sus productores.
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