Estos pecados capitales del servicio en realidad
son pecados capitales en la atención al cliente,
en la interacción entre cliente y empleados de la
organización.
Sus causas pueden ser múltiples: una mala
actitud ante el servicio (anclada en creencias
negativas muy arraigadas), falta de talento social,
procesos de servicio burocráticos y liderazgo
(modelamiento), entre otros.