Existen dos clases de observación:
La observación no científica y la observación científica.
La diferencia entre una y otra está basada en
la intencionalidad: observar científicamente
significa observar con un objetivo claro,
definido y preciso, en donde el investigador
sabe qué es lo que desea observar y con qué
objetivo quiere hacerlo, lo cual implica que
debe
preparar
cuidadosamente
la
observación.
Observar no científicamente significa observar sin
intención, sin objetivo claro y por tanto, sin
preparación previa.