LUGARES INFINITOS
Aunque ahora que lo pienso un poco mejor Anita, Maria y yo llegamos en junio, mi
recuerdo que mi cuarto tiene paredes mamá no sé cuándo, pero nos dijo que
rosadas –lo cual me da un motivo para alguien compró la casa –sí, la que tenía
considerar esta mi casa- y un ventanal paredes rosadas- y que ese alguien llegó a
vecino al jardín. Aquí las baldosas son probar las cortinas -sí, compró las cortinas y
blancas con manchas negras ¿o negras con después la casa para ponerlas-, pero bueno
manchas blancas? No lo sé, solo sé que en esta historia no es sobre eso sino de la
ella tengo cinco, seis o siete años y estamos fuente que nunca prendieron y de la
todos: mamá, papá, Anita, Maria y yo, luego biblioteca de la casa del abuelo.
empiezan las peleas y de repente ya no
estamos.
Yo jugaba a ordenarla por colores, sacaba
libros para que leyéramos juntos durante los
Estoy en el tejado y los vecinos asustados fines
de
semana,
durante
la
primera
llaman a mis papás, espero que nadie este navidad sin él el gato me llevó a la
utilizando el internet porque las llamadas biblioteca y cayó Mujeres de Galeano –que
hacen que se caiga la conexión. Esos son los era el libro que en ese momento quería-
recuerdos que me gusta recordar para no supe que era el regalo de navidad del
hacer sentir mal a mamá, porque creo que abuelo porque él hacía cosas así por mí, por
tiene razón –como siempre-, también creo ejemplo, meses antes de irse o de siquiera
que no me gusta recordar, el jugo de piña o saber que estaba enfermo me dio un libro
ser una persona triste porque ya no quiero de gente que se muere y revive en cuestión
tener cinco, seis o siete años y abrazar a de minutos, o algo así me dijo. Igual yo
Trompitas mientras lloro y me vuelvo actriz, nunca lo leí porque creí que de no hacerlo
mamá, trepadora de techos y quien sabe no habría spoiler y él no se iría nunca o por
qué más para hacerme la que no se da lo menos no sin volver.
cuenta de nada, pero lo recuerda todo.
En esta casa busqué al abuelo cuando
***
estaba en segundo porque las niñas del
salón decían que el libro que nos habían
Pasado
mandado era muy difícil y leímos juntos el
tal Principito, ese día el abuelo me explicó
El día en que llegamos aquí nos llevaron a que los libros de “niños” no existen, que lo
piscina en el club, después de ese hubo único que existe son los libros para adultos
muchos días de piscina y clases de tennis, tan perdidos que necesitan dibujos.
natación o cualquier deporte que se nos
ocurriera. También hubo comida sin sal También estaba la fuente que nunca vi
porque el abuelo sufría del corazón, yo dije encenderse, era de un niñito cargando una
que me quería ir a vivir al frente, pero me sombrilla, un jardín inmenso y claro la sala
dijeron que eso no era una casa sino un de televisión porque el abuelo decía que los
local. televisores en los cuartos separaban a las
familias así que era mejor tener una sala
para ver tele juntos.
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INFINITO | 2019