INFILTRACIÓN MUNDIAL - SALVADOR BORREGO E. Infiltración Mundial (Salvador Borrego E.) | Page 74
Los temores del general francés estaban justificados. La propaganda se encargó
de ocultar la realidad. Y es que se quería enardecer a la opinión pública occidental
para que aceptara la guerra que se le había impuesto contra sus propios
intereses, en favor del marxismo.
NUEVOS ESFUERZOS DE LA INFILTRACIÓN.
Al iniciarse la campaña de Polonia muchos generales y oficiales alemanes en
retiro fueron llamados al servicio. Entre ellos, el general Ritter von Leeb,
adversario de Hitler, y el general Hammerstein, ex jefe del ejército, apodado el
"general rojo" porque era simpatizador de la URSS. Había sido oculto cómplice del
general Schleicher, muerto por la Gestapo.
El general Hammerstein recibió el comando de un Cuerpo de Ejercitó en el Rhin e
inmediatamente planeó invitar a Hitler a que visitara a las tropas con la intención
de capturarlo. El oficial de Estado Mayor Fabían Von Schlabrendorff se apresuró a
poner a los ingleses al tanto de lo que se planeaba y lo refiere de la siguiente
manera: "Al estallar la guerra mi tarea fue informar a los ingleses del plan de
Hammerstein. La Embajada Inglesa había sido abandonada ya, pero logré
alcanzar a Sir George Ogilvy Forbes, consejero de la embajada y entregarle mi
mensaje. El plan de Hammerstein no se realizo. Hitler, que poseía un verdadero
instinto misterioso para el peligro personal, canceló de pronto su visita al cuartel
general de Hammerstein y poco después ordenó un cambio en el mando:
Hammerstein sé encontró una vez más retirado".
Otro ex jefe del Ejército, el general Werner Von Fritsch (quien había sido partidario
de un acercamiento con el Kremlin y al que la Gestapo puso en entredicho,
aunque luego fue rehabilitado por Hitler), pidió participar de la campaña de
Polonia, como comandante de un regimiento. Marchaba tan adelante en un sector
expuesto al fuego enemigo, que sus allegados creen que buscaba la muerte, tal
vez decepcionado por el fracaso de su carrera. En el cerco de Varsovia cayó
herido y murió minutos después.
En otro tiempo Von Fritsch había coincidido parcialmente con los infiltrados y
participado en los planes para derrocar a Hitler, pero en la campaña de Polonia se
concretó a combatir. Entretanto, los infiltrados se hallaban en otros sitios más
elevados y más seguros.
Cuando la guerra con Polonia estaba evidentemente ganada, el 19 de septiembre,
Hitler habló públicamente en Danzig para hacer un llamado de paz a Inglaterra y
Francia. "Yo no tengo ninguna intención agresiva respecto a Inglaterra y Francia.
Mis simpatías están con el soldado francés que no sabe muy bien por qué debe
combatir". A continuación daba gracias a Dios por la victoria de Polonia y le pedía
que hiciera "comprender a los demás pueblos cuán inútil sería esta guerra".
74