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INFILTRACIÓN MUNDIAL
Dentro del cerco, "las esperanzas ya moribundas aletearon otra vez. Una nueva
ansia de vida, una alegre confianza, un renovado espíritu emprendedor
empezaron a agitarnos… La salvación nos hacía ya señas."
Ocho días después de iniciada la "Operación Tempestad de Invierno". Hoth
había avanzado cien kilómetr os.
El invisible hilo Berlín-Ginebra-Moscú comunicaba al mando soviético que Hoth
llevaba las divisiones 6, 17 y 23, que en Vassilievska (a 50 kilómetros de
Stalingrado) había hecho un alto para reabastecerse de combustible y que sus
tropas estaban muy fatigadas. Algunas avanzadas llegaron a 30 kilómetros de
Stalingrado, Dentro del cerco eran visibles las señales luminosas que sus
compañeros les hacían desde el exterior.
El mariscal Von Manstein, comandante del Grupo de Ejércitos del Sur y
superior de Von Paulus, así como el general Hoth, jefe de las fuerzas de
rescate, le dijeron a Von Paulus que empujara desde dentro, en retirada, para
hacer el enlace. Pero Von Paulus dudaba, calculaba y pedía mil toneladas de
combustible.
En el sector de posible ruptura los soviéticos lanzaron sus ejércitos 51º y 66º y
el 2º Cuerpo de Ejército. Hoth ya no podía avanzar y Von Paulus había
desaprovechado (del 20 al 23 de diciembre) la última y pequeña oportunidad de
salvación.
Von Manstein y Hoth juzgaban que había tantas posibilidades de fracaso corno
de éxito y que la fe de las tropas del 6º ejército podía haber hecho posible lo
que con cálculos parecía imposible. Un Reichenau o un Rommel, decían,
hubiera actuado ya sin hacer cuentas, dada la emergencia.
Para hacer más crítica la situación, los soviéticos habían desmoronado de un
golpe al 8º ejército italiano, que guarnecía un sector bastante al noroeste. Hoth
tuvo que ceder parte de sus fuerzas para aquel nuevo boquete y retroceder.
Cuando el Ministro de Relaciones de Italia, Galeazo Ciano, le preguntó a un
oficial alemán si el 8º ejército italiano había padecido muchas pérdidas, el oficial
le contestó: "Ningunas pérdidas…¡Se han largado!"
Además del esfuerzo de Hoth se estaban organizando otros contingentes en
Alemania para auxiliar al 6º ejército, pero aún faltaban meses para terminar de
equiparlos.
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