de los derechos. Cuando en uno de sus primeros
discursos Martin Luther King Jr. anunciaba que
“We are here in a general sense because first and
foremost we are American citizens, and we are
determined to apply our citizenship to the fullness
of its meaning”10 [Estamos aquí en sentido general porque primero y ante todo todo somos ciudadanos de los Estados Unidos, y estamos decididos
a serlos en su pleno significado], tenía en cuenta
que igualar los derechos de los negros a los del
resto de la ciudadanía norteamericana era benéfico para la comunidad que representaba. Pese a
la desigualdad real entre negros y blancos en
Cuba, conseguir la igualdad no alcanzaría para
hacer respetar derechos que siguen siendo negados al conjunto de la sociedad. Sin tener en cuenta
ese “detalle” básico, cualquier traducción está
abocada al fracaso. Tanta insistencia en la traducción parecería adolecer de una perspectiva dependiente y neocolonial pero es apenas reflejo y reacción a una prensa y un régimen que sólo se dan
por enterados cuando dichos debates se publican
en inglés.
Notas:
1- Zurbano, Roberto. “For Blacks in Cuba, the
Revolution Hasn't Begun,” The New York Times,
23 de marzo de 2013. http://www.nytimes.com/2013/03/24/opinion/sunday/forblacks-in-cuba-the-revolution-hasnt-begun.html
2- La Jiribilla, No. 621, 30 de marzo - 5 de abril,
2013.
3- Morales, Esteban. “La Revolución cubana comenzó en 1959”.
24
http://www.lajiribilla.cu/articulo/4159/la-revolucion-cubana-comenzo-en-1959
4- Pérez Castillo, Ernesto. “Para los negros, la
Revolución no ha terminado, ni para nadie de este
lado”.
http://www.lajiribilla.cu/arti