Identidades Numero 2, Mayo 2014 | Page 10

¿Por qué no estoy en LASA? Carta a la Asociación de Estudios Latinoamericanos Manuel Cuesta Morúa* 10 ¿P or qué no estoy en LASA? Mi país persevera en la no normalidad. Es el país que ha tenido, por ejemplo, más representación numérica en los congresos de LASA al tiempo que ha sido el de menor representación plural en sus debates. Es al mismo tiempo el país que genera más pasiones encontradas en el hemisferio occidental, y el que menos tolera el encuentro de sus diversas pasiones dentro de la isla. Es también el lugar donde, como se solía decir antes en América Latina, la ley solo existe para los enemigos. Por esas tres razones no puedo participar en este congreso de LASA. El pasado año fue el último en el que la Cuba oficial monopolizó los paradigmas del debate sobre Cuba, desde Cuba, en un evento de esta solvencia. En el 2013 pude participar por primera vez, junto a dos entrañables colegas, en este prestigioso encuentro de ideas para abrir, también por primera vez, la posibilidad de que el pensamiento independiente dentro de Cuba fuera reconocido en el mismo espacio en el que por años ha sido reconocido solo el pensamiento orgánico del poder, que a veces suele ser crítico. Parecía que el gobierno comenzaba a aceptar cierta normalidad, al menos en la discusión entre cubanos diferentes que habitan el mismo espacio territorial. Pero su intolerancia al encuentro civilizado de pasiones distintas al interior de Cuba amenaza con revertir el derecho a la diferencia, es decir, el paso a la normalidad. Y entonces usan, con abuso, de la ley. ¿Cuál de ellas? La que proviene del poder, no de la autoridad. El 26 de enero del presente año fui detenido por el intento de organizar un Foro Alternativo a la II Cumbre de la CELAC. ¿Para qué este Foro Alternativo? Para discutir sobre la Declaración Constitutiva de este espacio sub hemisférico que reúne a Jefes y Jefas de Estado de América Latina y el Caribe, como ocurre en cualquier cumbre que se organiza en el mundo. ¿Qué dice la Declaración Constitutiva de la CELAC? Bueno, que todos los ciudadanos latinoamericanos y caribeños tenemos los derechos fundamentales que debemos tener y que los Estados están obligados a proteger. Excepto el cubano. Por esta excepción en las Américas estuve cuatro días en una celda, por cuatro días fui interrogado y, luego de liberado, se me impuso una Medida Cautelar que me obliga a acudir todos los martes a una estación policial a firmar mi presencia hasta el día presumible en que se me celebre juicio. Porque estuve detenido por defender lo que se supone promueve el Estado en mi país, saliendo con una