Identidad y Pertenencia. Guanajuato Nuestras historias | Page 15
De lo contrario los esfuerzos comienzan a menguar, los intereses a disiparse y la identifica-
ción de nuestros jóvenes con su territorio de nueva cuenta se nubla. Las universidades son
nuestros mejores voceros y aliados, igualmente nuestros patrocinadores y talleristas quienes
con un máximo grado de generosidad aportan tiempo y conocimiento al desarrollo de estas
invaluables historias. En tiempos donde es realmente difícil atraer inversión y turismo dada
la ola de inseguridad que se vive en el país y en el estado, los documentales de Identidad y
Pertenencia viajan por el mundo y representan de manera inmejorable a Guanajuato. Es ur-
gente, por tanto, que este programa sea blindado y se multipliquen tanto los apoyos como los
valores que de aquí emergen, sus voces, los personajes y las vocaciones.
Identidad y Pertenencia evolucionó a la par de sus participantes, sus mentores, los personajes
centrales, los coordinadores del programa, las instituciones gubernamentales, las universi-
dades y sus autoridades académicas, nuestros patrocinadores, los festivales y las muestras a
los que llegan los cortometrajes; en concreto, del pulso mismo de la sociedad. Todos y cada
uno de los proyectos que transitaron por este programa experimentan un proceso complejo
para tornarse en documental. A su vez son una memoria incalculable, un espacio auténtico e
irremplazable en la consecución de diez años de un legado fílmico y sociocultural del estado
de Guanajuato, para México, para el mundo.
Necesitamos de la identidad y de la pertenencia para constituirnos en un momento y un
espacio particular. Se trata de posibilitar un lugar de adscripción histórico-temporal, una dis-
tinción como sujetos, familias, comunidades, instituciones; como una nación. El Festival Inter-
nacional de Cine Guanajuato aporta a través de este concurso de documental universitario
un legado en México y Guanajuato, una enseñanza. Consideramos significativo heredar un
archivo cinematográfico de nuestras historias para que en un futuro otras generaciones las
puedan conocer, estudiar y disfrutar. Tras diez años nuestros jóvenes finalmente terminaron
no por representar a héroes, sino por construirlos. Quien menos lo esperas puede tener el
valor más grande, dejar una huella imborrable. Son todos esos personajes quienes merecen
nuestro recuerdo.
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