Erre de reindustrialización
La reindustrialización sostenible de nuestro país es la clave para un crecimiento económico sólido, que genere empleo de calidad. La industria es la actividad que mayor solidez confiere a la economía de un país, generando riqueza, empleo y bienestar de sus ciudadanos por su potencial exportador y su mayor productividad. La industria genera valor añadido y dinamiza el conjunto del tejido empresarial. La industria es además la actividad que mayor inversión dedica a la I+D+i y la principal demandante de innovación y desarrollo tecnológico.
La bioindustria circular de la cadena del papel es un claro exponente de generación de valor, riqueza y empleo.
Erre de reinversión
El sector papelero español invierte el 8% de la facturación, muy por encima de la media de la industria española. Se trata de inversiones enfocadas a la innovación, el incremento de la capacidad, la mejora de la eficiencia y los costes, la renovación tecnológica y la calidad y el medio ambiente.
En la última década y pese a la crisis, el sector papelero español invirtió casi 2.200 millones de euros, una inversión media anual del 5,1% de su facturación.
Erre de resiliencia
La cadena del papel en España fabrica un muy amplio y equilibrado mix de productos que incluye papeles gráficos (prensa, revistas, impresión y escritura), papeles para embalajes (cajas, bolsas, sacos, embalaje flexible…), papel tisú (papel higiénico, pañuelos, rollos de papel de cocina, servilletas…) y otros papeles especiales para muy diversos usos.
Una de las grandes fortalezas del sector es ese amplio mix de productos, con más de 500 variedades de papel, y su capacidad de innovación en nuevos productos y aplicaciones. De hecho, el 30% de esas 500 variedades actuales no existía hace apenas treinta años y se estima que en 2030 el 40% de la producción del sector será de nuevos productos que aún no están en el mercado.
Erre de renovabilidad
La industria del papel es una bioindustria basada en un recurso natural y renovable: la madera, que se cultiva en plantaciones gestionadas sosteniblemente.
España es una potencia forestal: es el tercer país de la UE en superficie forestal. Para aprovechar la oportunidad que esto representa, la gestión forestal sostenible de esas masas forestales y su certificación es un tema clave, al que se está dando un gran impulso desde la industria papelera.
El 56% de la madera que utiliza el sector como materia prima es madera certificada local y el resto es madera también de procedencia local controlada. Actualmente está certificado el 55% del papel de fabricación nacional puesto en el mercado y el 56% de la producción de celulosa de mercado.
Erre de reciclabilidad
La industria del papel es referente del nuevo modelo industrial que propone la economía circular.
En España, el 71% del papel que consumimos se recoge y se recicla tras su uso y, para 2020, la industria papelera europea se ha fijado el objetivo de llegar al 74%, contribuyendo al desarrollo de la economía circular.
Las fábricas papeleras españolas reciclan 5,2 millones de toneladas anuales de papel usado como materia prima, lo que las convierte en subcampeonas del reciclaje europeo. En la UE, región líder del mundo en reciclaje de papel y cartón, empatamos con Francia y solo nos supera Alemania en volumen de papel reciclado.