How to Coach Yourself and Others Coaching De Vida | Page 92
Filosofia y coaching
A lo largo de la historia, filósofos de
diversas corrientes de pensamiento han
aportado al desarrollo de la disciplina.
La mayéutica socrática es, quizá, el
primer antecedente. Sócrates, a través
de preguntas reveladoras, orientaba a
sus interlocutores en la búsqueda de la
“verdad”, exponiendo las bases de sus
falsas creencias.
Así, los diálogos platónicos, basados en
una secuencia de preguntas y respuestas
entre lo que podríamos llamar “coach”
y “coachee”, constituyen un
antecedente del método del coaching.
Todavía en la antigua Grecia, la ética
aristotélica, basada en la búsqueda de la
felicidad, sigue siendo la gran
motivación que subyace a las sesiones
de coaching. MAYEUTICA: Arte a
través del cual nuestro cliente encuentra
su verdad o la verdad (dependiendo de
la visión del mundo propia del cliente),
con una función práctica para su vida.
No existe el enseñar sino sólo el
aprender, y éste surge sólo
reconociendo que el conocimiento no
está en el coach sino en los propios
coachees (clientes).
Pero quienes son los padres del
Coaching Moderno? En la época
moderna, el método fenomenológico de Edmund Husserl, el pensamiento existencialista de Jean Paul Sartre y la
psicología humanista terminan de moldear las bases filosóficas del coaching. La capacidad de tomar conciencia
sobre lo que nos ocurre y el planteo de un proyecto de vida es inherente a la reflexión desarrollada en una sesión
de coaching, que como material de análisis debe ser tratada libre de censuras y prejuicios.
El coaching también ha recibido una importante influencia desde la psicología del deporte a través del trabajo
de Timothy Gallwey, quien desarrolló una metodología de entrenamiento denominada “The inner game” (el
juego interior).
Este puede ser el ejemplo más claro de cómo el deporte pudo influir en las técnicas de coaching o bien cómo el
coaching aporta el concepto de juego interno, como condición de desarrollo de las acciones externas.
Fue a mediados de los ’70 cuando este excelente entrenador de tenis de Harvard con su método The Inner Game
- El Juego Interior, rompió los paradigmas existentes: “Siempre hay un juego interior que se está jugando en su