HOPE ingrid | Page 22

La adoración puede definirse como el acto de honrar y amar a una deidad, ídolo o persona de una manera “desinteresada”. El acto de adoración implica al ser total involucrado en dar alaban- za, acción de gracias y reverencia a esa deidad, persona u obje- to material. No es un asunto poco entusiasta, y sólo después de distinguir entre lo que es y no es la adoración, con respecto al objetivo divino, podemos empezar a responder a la pregunta an- terior más plenamente “Un corazón re- dimido, ocupado con Dios, que se expresa en adora- ción y acción de gracias”. Entonces, la verdadera adoración de Dios se distingue por los siguientes cri- terios: en primer lugar, se trata del cora- zón redimido de un hombre o una mujer que ha sido justificado ante Dios por la fe y que confía en el Señor Jesucristo para el perdón de los pecados. la verdadera adoración a Dios es el de- seo de continuar aumentando nuestro conocimiento de Dios. ¡Cómo hemos per- dido ese deseo en estos días! Aparte de la Biblia, que nosotros deberíamos estar leyendo diariamente, tenemos que com- plementar nuestro conocimiento me- diante la lectura de otros buenos libros, también. Tenemos que llenar nuestras mentes constantemente con las cosas de Dios; Dios siempre debe estar en nues- tra mente, y todo lo que hacemos debe hacerse con referencia a Él (Colosenses 3:17; 1 Corintios 10:31).