Escudriñando
las escrituras.
El pueblo a quien Jesús se
dirige era celoso y conoce-
dor de las Escrituras. No
se podía juzgar que ellos
no estudiaran. Sin embar-
go, Jesús le exhorta para
ir a las Escrituras de una
manera diferente, de modo
39 Escudriñad las que pudieran descubrir lo
Escrituras; porque relacionado con su desti-
eterno y con el Mesías
a vosotros os parece no
que tanto esperaban. Pero,
que en ellas tenéis la ¿qué significaba esto? ¿No
vida eterna; y ellas eran ellos los maestros de
los
son las que dan tes- la ley? ¿No eran ellos pue-
intérpretes para su
timonio de mí;
blo? ¿No estaba todo lo
que hacían rodeado de la
ley? ¿No habían hecho de
ella la llamada tradición
de los ancianos? ¿Por qué
entonces Jesús les mandó
a escudriñad las Escri-
turas? ¿Estaría el Señor
poniendo una separación
entre la falta del estudio
diligente y la necesidad de
escudriñarla de una ma-
nera distinta? Una traduc-
ción más exacta de este
texto pareciera decirnos,
como sigue: “Escudriñáis
las Escrituras pensando
tener la vida eterna”. Con
esta traducción podemos
ver la intención de aquel
Juan 5:39
pueblo cuando se acerca-
ba a las Escrituras. Los
judíos que retornaron de
la diáspora se dedicaron
a estudiar las escrituras
más para contar sus pa-
labras y las sílabas, que
para penetrar en su senti-
do real y espiritual. Ellos
habían llegado a pensar
que por el sólo hecho de ir
a ellas, ya obtenían la vida
eterna. ¿Cuál fue el propó-
sito de esta exhortación?
Lo que Jesús está dicién-
doles es que la lectura
apresurada de las Escri-
turas es de poco provecho.
Uno puede leer toda la Bi-
blia, y no ver sin embargo
su belleza, ni comprender
su significado profundo
y oculto. Abramos nues-
tro corazón para que el
mensaje de hoy despierte
en nosotros el deseo que
tuvieron los hermanos de
Berea, quienes no se con-
formaron con lo que Pablo
les dijo sino que “recibie-
ron la palabra con toda
solicitud, escudriñando
cada día las Escrituras
para ver si estas cosas
eran así” (Hch. 17:11b)
Hay un gran beneficio al
escudriñar sabiamente las
escrituras. Jesús destacó
la importancia del estudio
de la Biblia para bendición
del alma. Conozcamos la
urgencia de este imperati-
vo bíblico.