Diálogo con el paisaje
En las faldas de una imponente formación rocosa en Malinalco, emerge Morada de Piedra como una intervención arquitectónica que celebra la simbiosis perfecta entre construcción y paisaje. Este proyecto residencial, obra del estudio COLAR Colectivo de Arquitectura, redefine el concepto de casa de campo al integrar magistralmente elementos preexistentes con una visión contemporánea que respeta profundamente su entorno natural.
Diálogo con el paisaje
Morada de Piedra no confronta su entorno; lo abraza. La vivienda se desarrolla como una extensión orgánica del terreno, estableciendo un diálogo constante con la majestuosa peña que domina el horizonte. Este enfoque deliberado sigue la filosofía“ Soft Loft”, caracterizada por espacios continuos que fluyen libremente sin barreras visuales significativas, maximizando la sensación de amplitud. Los arquitectos han diseñado ventanales estratégicos de piso a techo que enmarcan el paisaje como si fueran lienzos vivientes, convirtiendo la naturaleza circundante en parte integral de la experiencia habitacional. La peña no es simplemente un telón de fondo; es protagonista del espacio vital, una presencia constante que define la identidad del proyecto.
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