Es un lugar de magia silenciosa, un lugar fuera de lo común que proporciona un espacio de respiración muy necesario para los visitantes de todas las edades.
je. Grandes ventanales permiten abrir completamente el espacio, dejando entrar la brisa del bosque, el sonido del agua y los aromas del entorno. En el techo, una ventana circular invita a mirar las copas de los árboles y perderse en el cielo. El diseño no solo es poético, sino también funcional: es accesible para sillas de ruedas y lo suficientemente espacioso como para permitir el ingreso de camas hospitalarias. Dentro, la madera de roble crea un ambiente cálido, con cojines móviles que permiten a los más pequeños construir, descansar o jugar, según lo necesiten.
Naturaleza como medicina
La cabaña puede reservarse por pacientes de cualquier especialidad, para usarla con terapeutas, familiares o simplemente como un espacio de respiro. Lejos del bullicio hospitalario, ofrece una experiencia transformadora, donde el entorno se convierte en parte del tratamiento. Más que un proyecto arquitectónico, la Cabaña al aire libre para el cuidado representa una nueva forma de entender el diseño como herramienta de sanación. En un mundo cada vez más medicalizado, este pequeño refugio recuerda que, a veces, lo que más cura es la naturaleza... y un buen lugar para habitarla.
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