HOLOCAUSTO BAJO LA LUPA - JURGEN GRAF El Holocausto bajo la Lupa | Page 143

HOLOCAUSTO BAJO LA LUPA del Canadá, de Francia, de Inglaterra, de la Argentina, de Colombia, de Israel y de por lo menos 13 ciudades de los EE. UU. «Es fantástico», dice Iris Krasnow de Chicago. «Aquí tenemos juntas a cinco generaciones, del bebé de tres meses hasta el anciano de ochenta y cinco años. La gente llora de felicidad y viven un momento, maravilloso. Es casi como una reunión de fugitivos de la Segunda Guerra Mundial.» Sam Klaparda de Tel Aviv quedó mudo, al observar en el salón del Hotel Marriott del aeropuerto internacional de Los Angeles un árbol genealógico imponente. «Es grandioso, todos los parientes que tengo» dijo... Para la madre de Iris Krasnow, Hélène, que emigró desde Polonia a Francia y de allí a los EE. UU., la reunión significó un acontecimiento muy grato. «No puedo creer que tantos hayan sobrevivido el holocausto. Aquí se puede ver tanta vida – una nueva generación. Es maravilloso. Si Hitler lo supiera, estaría dando vueltas en la tumba.» 81 De los centenares que los Steinberg no pudieron descubrir, seguramente muchísimos han perdido la vida bajo el dominio alemán. Otros viven, como aquellos que fueron encontrados, diseminados por todos los países del mundo occidental, desde Israel, pasando por los EE.UU. hasta la Argentina. Y aún más viven en las inconmensurables extensiones de Rusia o murieron allá de muerte natural. 40. Un holocausto solo no fue suficiente para los reeducadores El genocidio imaginario de los seis millones de judíos aún no les bastaba a los reeducadores. Es así como además 81 Citado según Serge Thion, Vérité historique ou vérité politique?, La Vieille Taupe, 1980, p. 325. 143